L. P.
El Juzgado de lo contencioso-administrativo número 1 de Gijón ha dictado una sentencia favorable a la demanda de un agente de la Guardia Civil de la Comandancia gijonesa, que había denunciado un recorte en el complemento de productividad que debía percibir. Este recorte fue propuesto el año pasado desde la Jefatura de la Comandancia para los complementos de productividad de los agentes y afectó a más de una decena de guardias civiles destinados en la ciudad, tal y como denuncia la Unión de Guardias Civiles de Asturias.
El sindicato consideró en su día que se trataba de una medida «arbitraria e injustificada, pues adolecía de los parámetros objetivos que amparasen o justificasen dicha resolución». De hecho, llegaron a manifestarse en dos ocasiones ante la Comandancia de la Guardia Civil gijonesa en señal de protesta.
Además, la Unión de Guardias Civiles interpuso demandas judiciales en defensa de los guardias civiles afiliados que resultaron perjudicados por los recortes en el Juzgado de lo contencioso-administrativo número 1 de Gijón. Ahora, en una sentencia dictada el pasado día 5 de enero el juez ha fallado a favor del guardia civil y ha condenado a la Administración a que proceda al abono del complemento de productividad que reclamaba el agente.
Tal y como señala el sindicato, en la sentencia se detalla que el examen de los datos objetivos revela que el trabajo realizado por el agente durante el período de tiempo en que fue privado de la percepción del complemento aludido «fue similar e incluso superior» al realizado por otros compañeros de su unidad que sí percibieron dicho complemento en ese período de tiempo.
A juicio de la Unión de Guardias Civiles, el fallo judicial «pone en evidencia la arbitraria gestión realizada en la adjudicación del complemento de productividad en la Comandancia de la Guardia Civil de Gijón», que ya venían denunciando «en innumerables ocasiones y que ahora se confirma en los tribunales de justicia», destaca el sindicato en un comunicado.
El colectivo lamenta asimismo que el recurso interpuesto inicialmente por el agente y dirigido al coronel jefe de la Guardia Civil en el Principado de Asturias hubiera sido desestimado por él mismo en su momento y «deba ser la justicia ordinaria, una vez más, quien dé la razón al eslabón más débil de esta cadena y tenga que poner en su sitio a los responsables de estas conductas caciquiles y discriminatorias, demasiado habituales», sostienen.
Por ello, aseguran que continuarán denunciando las irregularidades que «atentan contra la buena imagen de la institución».
