Luján PALACIOS

El padre de Irene Candia Roqué trabajó en un barco pesquero, y ese nexo familiar le ha valido a su hija un reconocimiento de ámbito nacional. Porque esta alumna del Colegio Virgen Mediadora - Dominicas se inspiró en el ejemplo paterno para preparar un trabajo que ha sido seleccionado entre otros ochenta de todo el país en la XII Sesión nacional de modelo de Parlamento europeo, organizado por la Fundación San Patricio de Madrid. Irene Candia defendió una ponencia sobre la sobreexplotación pesquera que le ha dado el pasaporte a la fase final de este certamen, que tendrá lugar el próximo mes de octubre en Cádiz. Ha sido, además, la única asturiana que lo consiguió.

El debate se celebró entre el 24 y el 27 de febrero en Madrid, en el Congreso de los Diputados, donde ochenta jóvenes llegados de toda España, todos ellos estudiantes de primero de Bachillerato y de ciclos formativos de Grado Medio, se convirtieron en diputados por unos días. Previamente, tuvieron que pasar una selección inicial, en la que se eligieron los mejores trabajos referidos a cuatro grandes bloques temáticos: la sobreexplotación pesquera, la energía nuclear, los problemas de las redes sociales y la defensa de la UE de los derechos humanos más allá de sus fronteras.

En su caso, Irene Candia, lo tuvo claro desde el principio. «Conocía el mundo de la pesca por mi padre, así que en ese sentido fue más fácil». Las conclusiones de su estudio se refieren a «la excesiva dependencia de la pesca española de los caladeros de fuera, las consecuencias globales que podría tener una explotación en la supervivencia de determinadas especies, los tratados que se establecen con otros países para preservar la pesca y la importancia de la acuicultura como solución a la escasez de algunos ejemplares», como ella misma enumera.

Los alumnos expusieron el trabajo en forma de resoluciones y de enmiendas, al modo de los debates reales en el Parlamento. Para ello, se les instruyó sobre el protocolo que se debía seguir, que no solo incluía las fórmulas con las que dirigirse a la Presidencia o entre ellos mismos, sino también la forma de vestir: ellos tuvieron que enfundarse en traje y corbata, y ellas en traje de falda y chaqueta.

El ministro de Educación, José Ignacio Wert, fue testigo del debate, y el encargado de entregar los diplomas finales. Los veinte mejores alumnos se encuentran, como premio, en la fase internacional, que se celebra entre Eslovenia y Cádiz. Hasta la provincia andaluza se desplazará en octubre Irene Candia, ya que la primera tanda de exposiciones se celebraba «coincidiendo con el viaje de estudios» y allí deberá defender su trabajo en inglés.

«Es un poco más difícil, pero no habrá mucho problema; es cuestión de prepararlo», pronostica la alumna, que después de finalizar el Bachillerato Humanístico y Social espera poder estudiar Traducción. La de octubre será una buena muestra de su valía, y allí se convertirá en parlamentaria internacional.