C. JIMÉNEZ

El reto está en 42.000 botellas o, lo que es lo mismo, 252.000 «culetes». La edición de 2012 de la fiesta «Gijón de sidra» aspira a superar las cifras de la última edición y cosechar, así, un nuevo éxito de participación, superando las expectativas de los hosteleros participantes. El evento reúne, desde ayer y hasta el próximo 14 de octubre a 34 sidrerías y otros tantos llagares que ofrecerán lo mejor de la gastronomía asturiana para disfrute de todos los asistentes.

Ayer el concejal de Desarrollo Económico, Fernando Couto; la directora de la Sociedad de Turismo, Ana Braña; el presidente de la Asociación de Hostelería, Ricardo Álvarez y el director de Fenicia como empresa organizadora, Iván de la Plata, asistieron en la sidrería Nava, de El Llano, al escanciado del primer «culín» de este «Gijón de sidra». «Es un evento importante para mantener la actividad en Gijón y atraer turistas en octubre a través de uno de nuestros signos de identidad», subrayó Braña. Para Fernando Couto esta fiesta es una demostración palpable del éxito de la unión de la iniciativa privada y pública en un mismo proyecto.

De otro lado, el colectivo «Iniciativa pol asturianu» tildó ayer de «retroceso» para la toponimia tradicional que el certamen «Gijón de sidra» dejara fuera de su logotipo el topónimo «Xixón», a favor de «Gijón», y que e ltradicional ni siquiera figura en los toneles distribuidos por toda la ciudad para promocionar la fiesta. Para la organización resulta «inexplicable» que se haya obviado la denominación tradicional en todo el material editado para el evento. El uso del asturiano en todos los carteles de actividades que se desarrollen en el municipio no implica ningún desembolso adicional, advierten desde «Iniciativa pol asturianu» al tiempo que instan al Ayuntamiento a gestionar este tipo de iniciativas desde la Oficina de Normalización Lingüística. «La impresión de una sola versión bilingüe de toda la cartelería no genera ningún gasto extra», concluyen desde la misma organización, poniéndose a disposición de los organizadores de «Gijón de sidra» para evitar que se repita idéntica situación en próximas ediciones.