La Fiscalía pide una condena total de seis años de prisión para tres responsables de una empresa que suministraba mano de obra a firmas estibadoras de El Musel para desarrollar tareas portuarias y a los que el Ministerio Público responsabiliza de un grave accidente que sufrió el 14 de febrero de 2012 un empleado suyo de 54 años de edad para el que además se solicita una indemnización de 257.800 euros. El juicio por estos hechos se celebrará hoy en el juzgado de lo penal número 3 de Gijón.

La Fiscalía de Siniestralidad Laboral del Principado asegura en el escrito de conclusiones provisionales presentado en el juzgado de instrucción que el siniestro tuvo lugar cuando el empleado se encontraba cargando a un barco chapas metálicas de 16 metros de longitud. Las grapas de uno de los laterales de la pieza se soltaron alcanzando al trabajador, que sufrió como consecuencia del accidente, numerosas secuelas: "deterioro moderado de las funciones cerebrales superiores, con deterioro cognitivo y pérdida de habilidades mentales y lentitud de ejecución en actividades motoras; pérdida de todas las piezas dentales; reducción de la agudeza visual y auditiva; hernias discales; paresia facial derecha; múltiples cicatrices; pirámide nasal desviada y presencia de un cuerpo extraño (diente), enclavado en el bronquio inferior derecho".

El Ministerio Público afirma que los empleados "no conocían la existencia de ningún procedimiento formal de seguridad específico para la ejecución de los trabajos". El siniestro se produjo, de hecho, "porque las operaciones de levantamiento no estaban correctamente planificadas ni vigiladas", según la acusación pública.

En el banquillo de los acusados se sentarán el director gerente de la sociedad, el jefe de operaciones y el delegado de prevención. Todos ellos serán procesados por un delito contra la vida y la salud de los trabajadores.