Jorge Espina y Libertad González presentaron en la mañana de ayer su renuncia como concejales en el registro municipal del Ayuntamiento de Gijón, entre fuertes críticas a la dirección local de IU. Las críticas también se hicieron extensivas hacia el coordinador regional de la coalición Manuel Orviz, quien hasta el último momento había intentado propiciar un acercamiento de posturas entre los sectores enfrentados en IU de Gijón. Las dimisiones no zanjan la crisis en el seno de la coalición, que permanece con su Consejo Político y la militancia divididos, a la espera de las elecciones primarias que se convocarán para el próximo 26 de septiembre, en las que probablemente confrontarán candidatos a la coordinación general de ambos bandos, según coinciden fuentes de los dos sectores.

El Ayuntamiento tendrá ahora que llamar a las siguientes personas en la lista electoral de IU para ocupar los puestos que dejan vacantes ambos ediles. Aunque aún no está asegurado al cien por ciento quiénes serán los nuevos ediles de la coalición, se perfilan para ocupar ambos puestos la exgerente de la Empresa Municipal de la Vivienda, Cristina Tuya, número ocho en la lista electoral y la militante del área de juventud de IU, Rosa Bueno, número diez en la lista e hija de un edil de Corvera. Los que le preceden en la lista, previsiblemente renunciarán, si bien no está descartada la posibilidad de que en lugar de una de las dos entrara Marcos Fernández, número nueve de la lista. Cristina Tuya, que es funcionaria municipal, tendría que solicitar una excedencia para incorporarse como concejala, lo que pasaría por su liberación para ese cargo.

Espina, que se considera difamado por las críticas vertidas desde otros sectores de IU de Gijón durante la refriega de las últimas semanas, acusó ayer a la dirección política de la coalición en la ciudad, que encabeza Marcos Muñiz, de llevar a cabo "maniobras constantes de desestabilización y de enrocamiento, en un auténtico golpismo que no se merece la militancia de esta ciudad". En su salida del Ayuntamiento, Espina reiteró que "no aspiro a ningún cargo institucional", lo que quiso contraponer a quien "lleva 30 años ocupando cargos públicos", el mismo, según él, que "lanza esas infamias", ha recalcado con referencia al edil y secretario de organización, Francisco Santianes. Espina también acusó a Santianes de "hipocresía política, falsedad y vergüenza política" por pedirle que continúe como concejal después de haberle acusado de desestabilizar IU.

Además, Jorge Espina acusó a la dirección política de Gijón de "secuestrar la voz de los militantes" y quien ha criticado la actuación de la Dirección regional, que ha tildado de "ampliamente decepcionante", llegando a calificar de "irresponsabilidad absoluta" la postura de Orviz en el conflicto. Espina, asimismo insistió en que no tiene ni apego al cargo ni "ninguna ambición desmedida". "No cambio ni de barrio ni de chaqueta" y acusó al otro sector de IU de "dinamitar" la alternativa política de IU en la ciudad.

Además, ha negado haber hecho nunca nada para que el anterior coordinador de IU de Gijón, Jesús Montes Estrada, dejara el cargo, en contra de lo que afirmó Santianes. Espina apuntó que nunca dejará de militar en IU.

Libertad González explicó que su renuncia no obedece sólo a motivos personales, sino también políticos, que se remontan a hace dos años. Acusó a Muñiz de "fracturar la organización sin importar el coste" y reprochó el no haberla respaldado como edil. La ya exconcejala también reprochó al sector mayoritario de IU que "durante el último año los consejos políticos de Gijón, tanto ordinarios como extraordinarios, tenían un único punto del orden del día: defenestrar a Ángel González (exportavoz de IU en la Junta General del Principado). No les importaba el desempleo de Gijón o el cierre de empresas. Nuestro problema era Ángel González". Respecto a la mediación de Orviz en el conflicto, criticó que hubiera asumido el planteamiento que efectuó la dirección local para derivar las votaciones a septiembre.