Quien habría imaginado en 1935, cuando se abrió la explotación minera de La Camocha, cuanta vida traería el carbón a este pequeño rincón del Gijón rural de la época. Los vecinos de La Camocha tuvieron que decirle adiós hace unos años a la mina. Pero la despedida no alcanza a los recuerdos. Al contrario. Siguen más vivos que nunca. Y así seguirán. Pili López Liñueira es una de las responsables de que "Así nació la Camocha" vea la luz. Se trata de un libro homenaje al barrio que debe su nombre a aquella vaca de un único cuerno (vaca mocha) que pastaba donde se hizo el primer pozo de la mina. La obra recorre toda la historia de La Camocha a través de la narración de familias que vivieron en la zona. De quién es la propiedad de las fincas, cómo surgió la fábrica de ladrillos y de tejas, cómo la urbanización fue aumentando y las diferencias entre el barrio de antes y el de ahora son algunos de los secretos que esconde el libro.
La idea original era crear un recuerdo para las antiguas alumnas de "La Escuelona", como ellas la llaman, "pero nos dijeron que no era material suficiente para editar un libro. Así que decidimos ampliar la idea original y abarcar a todo el barrio", explica Pili López, la principal impulsora del proyecto. "Lo hicimos únicamente por el recuerdo, no pensamos que nos iba a dar para tanto. La cosa se fue enrevesando y poco a poco nos liamos hasta dedicar un año y medio a recolectar fotos e información", apunta López antes de añadir que "nos llevó muchísimo trabajo y una cantidad de horas incalculable. Si las pagaran a dos euros me haría millonaria".
Conseguir la historia y datos de cerca de 250 familias no es tarea fácil, más si cabe cuando muchas de ellas han emigrado o se han mudado a otra punta del país. "Recibimos cartas y llamadas desde Barcelona, Málaga, Madrid e incluso de gente que en los años 60 se habían marchado a Alemania y Bélgica. La mayoría narran de donde vinieron sus padres, cómo pasaron la infancia en el barrio y la historia de su familia. Aunque hay gente que no quiso contar nada y sólo dieron sus datos", aclara la vecina con algunas de las imágenes recibidas entre sus manos. Asegura que en su búsqueda frenética por localizar a antiguos vecinos contactó con el programa "Hablar por hablar". "No esperaba gran cosa, lo hice únicamente por si había más familias fuera de Asturias que hayan nacido o crecido en el barrio y querían contribuir. Y, por supuesto, para que la gente que no viva en La Camocha y quiera comprar un libro pueden hacerlo", sentencia.
La mayor peculiaridad de esta recopilación es, como sus creadoras señalan, "que es un libro que crece". No porque sus medidas se agranden, sino porque la historia está incompleta y lista para que las nuevas generaciones la terminen. "Decidimos incluir al final del tomo 10 páginas en blanco para que las nuevas familias o los hijos de vecinos de La Camocha puedan escribir también sus aventuras", aclara Pili López. Una decena de cuartillas en las que podrían entrar las andanzas de, al menos, 20 parentelas.
El libro sin ánimo de lucro, que se venderá en quioscos, bares y demás establecimientos del barrio, destinará todas sus ganancias a la Asociación de Vecinos de La Camocha. Por el momento, ya se han editado 500 ejemplares, de los que el Ayuntamiento de Gijón ha solicitado una partida.
La presentación oficial tendrá lugar el domingo 6 de septiembre a las 12.30 horas en el llagar El Fugitivo, donde los asistentes podrán disfrutar de una espicha. Tras la muestra, unas 180 alumnas de la antigua escuela de La Camocha, varias de ellas participantes activas en la elaboración del memorándum, disfrutarán de una comida en la que recordar viejos tiempos.
