El objetivo era el de coordinar esfuerzos, y al menos en la práctica, se consiguió. El Centro de Seguridad Marítima Integral Jovellanos albergó ayer un simulacro de rescate en sus instalaciones con el que poner en contacto a todos los posibles actores en un caso de emergencia en alta mar: desde los pilotos rescatadores hasta los conductores de las lanchas rápidas o los médicos y técnicos a bordo de las ambulancias medicalizadas. Un ejercicio con el que se dieron por inauguradas las Jornadas de Atención al Paciente Crítico, organizadas precisamente con ese fin, el de poner en contacto a todos los profesionales implicados en un proceso laborioso en el que la coordinación y la agilidad son fundamentales.

El simulacro recreó el hundimiento de un buque con dos heridos en el agua: uno leve con hipotermia y otro grave con politraumas y quemaduras. Una buena ocasión para mostrar el trabajo de la embarcación rápida de salvamento para izar a bordo al herido, posteriormente inmovilizado y trasladado al dique de embarque para su evacuación al hospital en una uvi móvil.

La segunda parte del ejercicio tuvo lugar con la intervención del helicóptero de rescate, el "Helimer", que izó a bordo por medio de la grúa de rescate a un herido grave desde una boya de supervivencia en el mar, antes de hacer el intercambio del herido con la uvi móvil tras una maniobra de aterrizaje en una playa improvisada.

Un ejercicio que, como señalan los organizadores de las jornadas, sirve para que "todos los implicados en el proceso de atención a pacientes en estado crítico puedan aprender del trabajo de los demás actores, porque hasta ahora no existía demasiada coordinación".

Las jornadas se iniciaron ayer de manera oficial con la intervención del gerente del Sespa, José Ramón Riera, quien valoró de manera positiva "nuestra capacidad de reacción", y quien puso de manifiesto cómo "en la atención al paciente crítico es donde se la juega un sistema sanitario".

En la jornada de ayer se debatió sobre cuestiones como el electrocardiograma como herramienta para identificar a pacientes con riesgo de muerte súbita, los retos que presenta la atención a los recién nacidos en las emergencias, la atención a los pacientes con politraumas, las heridas por asta de toro, los quemados críticos o las nuevas tecnologías aplicadas a la medicina extrahospitalaria.

Para hoy están previstas varias mesas redondas en las que se debatirá sobre el papel de la simulación clínica, la situación actual de la formación en reanimación cardiopulmonar pediátrica, la eficacia y rapidez del helicóptero para el rescate en medio adverso o el protocolo para el traslado del paciente con virus de ébola en el helicóptero.

También se estudiarán las nuevas perspectivas tras la creación de la categoría profesional del técnico en emergencias sanitarias, con la participación de varios expertos en rescate en montaña, formación, uvi móvil y transporte en helicóptero de pacientes críticos.