Que el Ayuntamiento permita la entrada de perros durante todo el año en la playa de El Cervigón va a suponer, apuntan los dueños de mascotas, un aliciente económico para la ciudad. Ése es sólo uno de los argumentos que esgrimían ayer los ciudadanos que paseaban con sus perros por la playa de San Lorenzo para aplaudir la decisión municipal de dedicar el arenal situado en la zona de El Rinconín al disfrute de las mascotas. Hace semanas había tres posibles ubicaciones para la "playa para perros": la zona oeste del arenal de Poniente, Serín y El Cervigón. La comisión de Movilidad optó el pasado viernes por esta última localización. La más adecuada según los defensores de los animales.
Mar Fernández, vecina del barrio de La Arena y dueña del pequeño "Dexter", un perro de sólo un año de vida, era una de las que se felicitaba ayer por la decisión municipal. "Es verdad que la gente suele ser civilizada y recoge los excrementos y la basura que generan sus animales de compañía, pero hay casos puntuales en los que no se tiene una actitud tan cívica y por eso creo que es bueno que se haya escogido una playa con mareas que puedan limpiar la zona diariamente. En Poniente hubiera sido un caos", apuntó la gijonesa. Fernández acude con su pareja y su perro cada día al paseo de El Muro. Cuando hace bueno bajan a la playa. Aseguran que es uno de los mejores momentos que pueden vivir en compañía de su mascota.
No son los únicos. "El Cervigón está a diez minutos de San Lorenzo, se accede bastante fácil y no cuesta mucho llegar. Además cerca de esa playa están tanto el parque para mascotas como la zona de caravanas. Esta apertura todo el año puede ser un revulsivo económico importante para El Rinconín. Hay mucha gente que sólo viaja si es con su mascota y si Gijón se promociona bien vamos a tener mucha mejor imagen", argumentó ayer Gonzalo García, dueño de dos perros. El gijonés mantiene que fue uno de los que defendió desde un primer momento la necesidad de que Gijón fuera el primer concejo asturiano con playa para perros.
