Los bomberos del Ayuntamiento de Gijón tuvieron que intervenir ayer por la mañana en una confitería de la avenida de Portugal en la que el incendio de un horno provocó una gran humareda. Hasta el lugar de los hechos también se desplazaron agentes de la Policía Local. Los funcionarios controlaron el tráfico para facilitar el trabajo de los Bomberos. Cuando se ventiló correctamente el local y se revisó que la mercancía no había sufrido daños los propietarios de la confitería pudieron seguir con su actividad habitual.