Alrededor de 40.000 euros de gasto le han supuesto a las arcas municipales las jornadas en situación de prealerta por contaminación que ha vivido Gijón estas Navidades. El dinero se fue, fundamentalmente, en el pago de servicios de refuerzo del personal de la Policía Local y de la Empresa Municipal de Servicios de Medio Ambiente Urbano (Emulsa).

Los datos fueron aportados ayer por el edil de Seguridad Ciudadana, Esteban Aparicio, en su respuesta a la pregunta del PSOE en la comisión de Movilidad y Medio Ambiente sobre la aplicación de esta prealerta estipulada en el Plan de Control del Aire. La activación y desactivación de las alertas corresponde al Principado de Asturias. Aparicio reivindicó ayer la buena coordinación y contacto constante durante estos días entre la Consejería de Infraestructuras, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente y su concejalía. El día 20, jornada electoral, la propia Carmen Moriyón estuvo en las dependencias policiales haciendo seguimiento del diseño del dispositivo de restricción de tráfico por la prealerta en contaminación del aire. Prealerta que se desactivó el pasado domingo para mantener a Gijón en simple situación de aviso.

Por otro lado, y a preguntas de Ciudadanos, Aparicio aseguró que ya se ha ejecutado la comprometida inspección desde el Ayuntamiento a treinta empresas potencialmente contaminadoras. Sin embargo, el resultado de estas inspecciones no se podrá conocer hasta dentro de seis u ocho semanas.