Los niveles de polución atmosférica registrados en Gijón a lo largo del año pasado superaron, en todas las estaciones de medición diseminadas por el concejo, los niveles máximos fijados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para evitar daños a la salud humana, según denunció ayer la Coordinadora Ecologista de Asturias. La Coordinadora Ecologista hizo su particular análisis en base a los datos obtenidos por las estaciones de control, si bien parte de ellos, los relativos a las partículas en suspensión, difieren de los datos oficiales que maneja la Consejería de Medio Ambiente del Principado. La Consejería había informado a primeros de año de que Gijón había "cumplido la legislación sobre calidad del aire", a pesar de la acumulación de fenómenos meteorológicos adversos, dado que la media anual de concentración de partículas "se situó en 28 microgramos, lejos de los 40 establecidos como límite", "y las estaciones de medición registraron niveles de superación a lo largo de 34 días, por debajo de los 35 que fija la ley".

Ahora le toca el turno al análisis a los ecologistas, desde cuyas filas se indica que la Consejería dejó de aplicar en 2006 un factor de corrección al alza, recomendado por la Comisión Europea y por el Instituto Carlos III, que ellos sí aplican. "El Principado no aplica este factor desde el año 2006 de manera intencionada", señaló ayer Frucutoso Pontigo, que recalcó además que la administración regional elimina de la estadística los valores mas altos de contaminación alegando que se deben a fallos técnicos de la estación de medición "sin aportar prueba alguna de estos fallos, con lo que reduce las medias diarias".

Pese a la eliminación de los resultados más elevados, la media anual supera en todas las estaciones de control de Gijón sin excepción el máximo de 20 microgramos por metro cúbico de aire fijado por la OMS para evitar daños a la salud de las personas. Pese a ello, sólo una estación, la de Monteana, sobrepasó el límite legal de 40. Donde sí se habrían superado los límites legales, en base al cálculo con factor de corrección, es en los días con medias diarias mayores de 50 microgramos. La normativa fija que no se debe superar ese límite diario en más de 35 ocasiones al año, pero en las estaciones de medición de la zona oeste (La Calzada, Monteana, Tremañes y Jove) se sobrepasó ese número de días. No sólo eso, sino que en algunas jornadas la media diaria duplicó el tope legal, como ocurrió en Serín, La Calzada y Monteana, agregan desde la Coordinadora.

La contaminación por partículas inferiores a diez micras es de las más dañinas para la salud, dado que su pequeño tamaño hace que puedan penetrar profundamente en los pulmones. Peor es la contaminación por partículas inferiores a 2,5 micras, que llegan hasta el riego sanguíneo. En las tres estaciones que se mide este tipo de partículas se superó la media fijada por la OMS, en 10 microgramos, tope que la normativa legal eleva al doble.

Los efectos nocivos de otros contaminantes también han sido objeto de estudios epidemiológicos, recuerdan los ecologistas. Así, el dióxido de azufre (SO2) se asociado a muertes prematuras por enfermedades pulmonares y cardiovasculares, a la disminución de las funciones respiratorias y al desarrollo de enfermedades como la bronquitis. En cuanto a los óxidos de nitrógeno (NO2), a largo plazo provoca disminución de la función pulmonar y aumenta el riesgo de bronquitis aguda, tos y flema, especialmente en los niños. En la mayor parte de las estaciones de control de la contaminación se superaron en alguna ocasión las medias diarias máximas fijadas por la OMS para ambos contaminantes (20 microgramos para el dióxido de azufre y 40 microgramos para el dióxido de nitrógeno).

Otro de los contaminantes que se miden, si bien sólo en dos de las estaciones de control, es el benceno, con valores relativamente bajos en 2015 pero aún así con niveles que fueron el doble de los registrados en 2014, señala la Coordinadora Ecologista.

"Con los datos que facilita el Gobierno podemos comprobar lo peligrosa que sigue siendo la contaminación en Gijón", señala Pontigo.