El fuerte viento que azotó el concejo durante la madrugada de ayer jueves obligó a los Bomberos del Ayuntamiento de Gijón a intervenir en ocho puntos del casco urbano. A pesar de que, tal y como indicaron portavoces municipales, en ninguno de los casos se produjeron daños materiales de importancia ni hubo que lamentar heridos, los funcionarios de extinción de incendios tuvieron que desplazarse a varias calles en las que los vecinos denunciaban la caída a la vía pública de elementos que el viento había desprendido de terrazas y fachadas. La estación meteorológica local, situada en la zona de Somió, registró a las tres de la madrugada rachas máximas de viento de casi 60 kilómetros por hora. La Agencia Estatal de Meteorología valora que la situación no va a mejorar en los próximos días, por lo que la costa asturiana sigue en alerta por el temporal que traerá de nuevo fuertes rachas de viento y lluvia.