La alcaldesa se hará cargo de manera directa del control de la ejecución de las obras municipales. Ese fue el compromiso que con un contundente "de eso me voy a encargar yo" asumió Carmen Moriyón cuando el debate sobre la posibilidad de crear en la web municipal un espacio con información de las obras públicas -una iniciativa de la edil de Izquierda Unida Ana Castaño- derivó en una retahila de quejas de la oposición sobre la constantes de retrasos, irregularidades y malas ejecuciones de proyectos.

"Más cansada de todo esto que ustedes, estoy yo", sentenció la regidora. Moriyón se comprometió ante los grupos de la oposición a dar información periódica sobre la evolución de las obras, empezando por las que se financiarán con el recién firmado préstamo de 22 millones.

El plante de Moriyón fue entendido por todos como una desautorización pública a la labor de su edil de Mantenimiento y Obras, el veterano Manuel Arrieta. El concejal ya estuvo en el punto de mira en las pasadas semanas por los problemas con el servicio de mantenimiento urbano. De hecho, su concejalía está siendo reforzada con la incorporación de nuevos altos cargos con máxima responsabilidad.