La propietaria de un bar situado en la avenida de la Constitución se enfrentará hoy en la Audiencia Provincial a una condena de ocho años de cárcel acusada de utilizar su negocio para traficar con cocaína. La Policía encontró en el interior del establecimiento estupefacientes valorados en casi 5.000 euros. En el banquillo se sentarán, además, el hijo de la hostelera y la novia de éste. La Fiscalía considera que son cómplices del tráfico de estupefacientes y pide cinco años de cárcel para cada uno de ellos.