El nuevo presidente del Real Grupo de Cultura Covadonga, Antonio Corripio, recogió, ayer ante notario, las llaves de las propiedades del Centro Asturiano de La Habana en Gijón, que corresponden al local de Begoña y a la finca La Torre de Mareo, arropado por el secretario del club, Manuel Rodríguez y del director general, Jesús Martínez.

"Es una continuación de lo que llevamos defendiendo desde el principio, es un paso más", apuntó Corripio ya con los dos juegos de llaves en la mano. "La intención es ver las dos instalaciones pero iremos con gente del club a La Torre de Mareo para ver en qué estado se encuentra y, si cumplen las medidas de seguridad, y tal como defendimos en campaña y nada más llegar a la presidencia, abrir las instalaciones a la mayor brevedad posible. Pero deben cumplir unos registros de seguridad para los socios, que no dependen de nosotros, y dotar a esos espacios de personal. En cuanto eso se dé, se abrirá", matizó sobre una pronta apertura de ambas instalaciones.

El Centro Asturiano le puede afear sus primeras semanas de presidencia a Antonio Corripio tras el auto del juzgado de 1ª instancia número 11 de Gijón en referencia a la fusión por absorción y que establece que "el reconocimiento con carácter cautelar de la condición de socio del Real Grupo de Cultura Covadonga ha de referirse y afectar a aquellos socios del Centro Asturiano que figuraran en la lista relacionada en la escritura pública de 30 de junio de 2011 y que no hubiesen sido dados de baja con posterioridad". Con visible tranquilidad ante una posible impugnación del proceso, o anulación del mismo, Antonio Corripio estará presente esta tarde en la comisión jurídica de la entidad deportiva que se reunirá a partir de las cinco menos cuarto y en la que se analizará este auto judicial. De igual forma se procederá en ese encuentro con los servicios jurídicos a valorar qué decisión se toma al respecto al recurso del Grupo que aún queda pendiente en el Tribunal Supremo.

Una vez incorporadas las instalaciones del Centro Asturiano en el futuro se vislumbra la anexión del Club Hípico Astur (Chas). "El Chas es una decisión de los socios en asamblea de 2015, seguiremos siempre los mandatos del socio", apuntó Corripio que, no obstante, supedita cualquier actuación a la espera de la celebración inminente de las elecciones en el Chas. "Parece que hay dos candidatos, si gana uno parece que lo enfocará por un lado y si gana el otro lo enfocará de otra forma. Nos mantendremos al margen, con máximo respeto a una entidad amiga y una vez que haya nuevo presidente retomaremos las negociaciones", resolvió.