Una tarde de sidras en la popular plaza de Les Campes, en Pola de Siero, dio a un puñado de emprendedores la clave para triunfar. Hoy, pocos meses después, han alcanzado tal éxito que triunfan en países como la India, Arabia Saudí, Perú o Colombia. Lo suyo ha sido un ejemplo de libro de startup, empresa de base tecnológica que en un tiempo récord ha entrado en un periodo de aceleración y éxito máximo.
Los gijoneses han puesto en marcha la red social Wehey, una forma de comunicación diferente que "permite hablar con la gente cercana sin necesidad de números de teléfono, una forma de conectar y socializar con nuestros entorno de una manera diferente y sencilla", resume Pelayo Puerta, director ejecutivo de Wehey. La idea de crear esta herramienta novedosa nació "cuando tomábamos unas sidras y vimos como todo el mundo en la plaza estaba utilizando sus smartphones para hablar con otras personas en lugar de hablar con la gente de su alrededor". Y un paso más: "Probablemente todos estarían utilizando las mismas aplicaciones de mensajería y, sin embargo, aunque había un montón de gente en la plaza usando las mismas aplicaciones no podían conectar entre sí porque no tenían el número de teléfono del resto de personas".
De ahí la idea de crear Wehey, que se autodefine como "una red social geolocalizada y efímera". Se trata de una aplicación que permite a los usuarios buscar personas o publicaciones en redes cercanas e iniciar una conversación sin necesidad de conocer el número de teléfono del resto de personas. Las publicaciones que se realizan en Wehey duran 24 horas "y después desaparecen para siempre, y en las conversaciones privadas que mantienes con otros usuarios tienes la posibilidad de eliminar el contenido de la conversación de ambos dispositivos a voluntad", explica Pelayo Puerta siguiendo la máxima de que "lo que pasa en Wehey, se queda en Wehey".
Así, desde el principio la idea fue la de crear una aplicación "divertida, social, que te permita descubrir y relacionarte con las personas de tu entorno de una manera diferente y que el contenido no pueda ser difundido fuera de la plataforma como ocurre con otras redes sociales: privacidad y diversión", señala Puerta.
Con sede en Gijón, el equipo se compone de seis personas: la diseñadora Nuria Rodríguez, los desarrolladores Jorge Soto y Saúl Remis, el director de tecnología Pelayo Remis y Pelayo Puerta, director ejecutivo. Gracias a su trabajo, en apenas unos meses Wehey ya cuenta con presencia en más de 30 países, especialmente en España, Costa Rica, Colombia, Guatemala, India, Perú, México y Arabia Saudí.
De hecho, recientemente Wehey ha superado en los rankings de popularidad de Google Play a gigantes mundiales de la talla de Facebook, Twitter, Google +, Linkedin, Gmail, Google Chrome, Google Maps, Telegram o incluso Whatsapp, destacan los creadores de la compañía, quienes señalan cómo "es la primera vez que una startup asturiana consigue llegar tan alto en los rankings de Google en tantos países diferentes".
La compañía ha logrado colarse en programas como el Startup Grind de Google para emprendedores y el Google Launchpad de Barcelona 2015, así como en el Programa Global para Emprendedores de IBM o el Startup Race del South Summit. Además, han llegado a ser finalistas regionales de los Premios Emprendedor XXI de La Caixa, finalistas del Foro MID de las Industrias Creativas (Barcelona 2015) y finalistas del Foro de Inversión del IESE (Madrid 2015) entre otros.
Wehey forma parte actualmente de la junta directiva de Astur Valley, la recién creada asociación de startups asturianas, con el objetivo de "ayudar a otras startups y fomentar el ecosistema regional". Porque si algo tienen claro los gijoneses tras varios meses de trabajo en dura competencia con otras compañías de toda España y todo el mundo es que "en Asturias contamos con profesionales y startups de gran talento que nada tiene que envidiar a otras provincias con más peso dentro del ecosistema, como Madrid o Barcelona". Pelayo Puerta reconoce que el ecosistema no está tan afianzado en el Principado y "llevamos algo de retraso en ese aspecto", pero "estamos comenzando a coger impulso y el futuro pinta bien para nuestra región: Asturias, salvo por las comunicaciones con las grandes ciudades, es un lugar estupendo para emprender". Ellos se han lanzado, con red. Y les ha ido estupendamente.
