José Ramón Vallina y Roberto Menéndez, expresidente y extesorero de la Asociación Deportiva Lloreda han aceptado la pena de un año de cárcel por un delito de administración desleal condicionada la suspensión a que abonen las responsabilidades civiles de 9.000 euros, entre ambos más costas del juicio tras haber llegado las partes a un acuerdo esta mañana. Para Carlos Javier González Quijano, exsecretario de la entidad, la pena es de seis meses de prisión.

Los ahora condenados regentaron desde mayo de 2009 hasta febrero de 2012 la directiva de esta entidad deportiva sin ánimo de lucro, con la condición de club deportivo básico y con objeto social de promoción y práctica de actividades deportivas y, en concreto, de fútbol infantil. En ese tiempo dejaron una deuda al club de 5.015,77 euros tras solicitar un préstamo bancario y no atender al pagos de sus cuotas. "La deuda está subsanada", señala el actual secretario de la entidad, José María Pérez.

Tras el relevo al frente de la Asociación Deportiva Lloreda, los nuevos responsables, que ayer se dieron cita ante el Juzgado de lo Penal número 3 de Gijón, se percataron de las irregularidades en las cuentas de los ejercicios anteriores, con falsificación de actas de por medio. Además descubrieron las deudas con varias empresas y hasta se les embargaron las cuentas. Ahora mantienen vigente una deuda con la Empresa Municipal de Aguas (EMA) por valor de 828,15 euros, "un mes pagamos lo que gastamos y al mes siguiente lo que debemos", y de 12.000 euros con Contratas Piñera, por una obra realizada en las instalaciones. "Ahora la situación está saneada, está saliendo a flote gracias a donaciones y espero que con el acuerdo al que se ha llegado vayamos hacia adelante y podamos crecer un poco", valora Pérez.