El miércoles 29 de junio los socios del Club Hípico Astur (Chas) votarán el preacuerdo que está negociando la directiva de la entidad hípica, presidida por Jesús Kocina, con el Grupo Ganax, entidad ligada a Inversiones Montewales, principal acreedora del club, y de la que depende el convenio de salida del concurso de acreedores aprobado por el juzgado. Ambas partes se muestran optimistas y esperan cerrar un preacuerdo esta semana para que los socios puedan disponer de él a partir del próximo lunes de cara a su votación en asamblea.
Montewales está dispuesta a la reducción de la adquisición de terrenos prevista inicialmente en el convenio aprobado en el juzgado. En el mismo se contemplaba la enajenación por parte del Chas de 26.000 metros cuadrados, y la directiva de Kocina quiere reducirla a 19.000 metros cuadrados. Asimismo, Ganax renunciaría a la gestión del Chas durante 30 años, otro de los términos del acuerdo inicial con la anterior directiva, presidida por Miguel Salvador López.
Sin embargo, la deuda concursal que debía asumir entonces la empresa era de 1.672.000 euros y ahora esa cifra ha crecido por la generación de deuda contra la masa, creada durante el proceso concursal. A la espera de cerrar la auditoría que está realizando la directiva de Jesús Kocina, se estima que la cantidad final estará entre 2,1 y 2,2 millones.
Es decir, en torno a 500.000 euros más que debería asumir Montewales por la adquisición de terrenos, dado que el Chas quiere a toda costa quedar a deuda cero tras la enajenación parcial de suelo. De hecho, los flecos pendientes de la negociación se centran en buscar la contraprestación por la que Montewales asumiría esos 500.000 euros de más. Se manejan alternativas para evitar que la firma se quede con más de los 19.000 metros cuadrados que está dispuesto a enajenar la directiva de Kocina. Para ésta es primordial tanto que la entidad se quede saneada por completo como que la pérdida de terreno sea la mínima posible, de ahí que intente por todos los medios que no supere los 19.000 metros cuadrados.
En cualquier caso, los nuevos términos serán sometidos a votación de la asamblea, que tendrá la última palabra. Sin embargo, los socios deberán tener en cuenta a la hora de votar que Ganax y Montewales tienen la sartén por el mango, toda vez que el convenio inicial está aprobado por el juzgado, que ya ha dictado el fin del concurso del Chas en base al citado convenio. Por ello, los responsables de dichas sociedades, que comparten domicilio, podrían solicitar la ejecución forzosa del convenio en sus términos originarios si los socios del Chas se oponen a ejecutarlo de forma amistosa, como pretende la directiva de Kocina para buscar la salida menos perjudicial para el patrimonio de la entidad.
Kocina, que rechaza dar detalles del preacuerdo hasta ponerlo a disposición de los socios, simplemente manifiesta que "tenemos que cerrarlo sí o sí antes del lunes para que los socios decidan la semana que viene; lo más importante es que se comprometan a pagarnos la deuda íntegra y creo que vamos a poder cerrarlo a lo largo de esta semana". Fuentes cercanas a Montewales también se manifiestan optimistas en cuanto a un desenlace en los próximos días.
