La Asociación de Padres y Tutores de Antiguos Alumnos del Sanatorio Marítimo se ha quedado como accionista universal de Apta tras haber comprado por un euro el 46% de las acciones que poseía en el centro especial de empleo Ilunion (el grupo empresarial de la Corporación ONCE).
Los familiares de los trabajadores fueron informados ayer por el presidente de la asociación, Joaquín Fernández y por el administrador de Apta y abogado de la asociación, Luis Ángel Simón Yanes en la asamblea que se celebró en el Centro Municipal de El Llano.
Simón Yanes consideró positivo el acuerdo alcanzado para la salida del grupo ONCE del accionariado de Apta, al haber mejorado las condiciones que habían planteado en septiembre del año pasado y al tratarse de un paso que Ilunion había reiterado durante todo este tiempo que era irreversible.
Las condiciones pactadas para la salida suponen que la Corporación ONCE realizará varias aportaciones periódicas a Apta durante 4 años que sumarán 3 millones de euros para garantizar su liquidez. Además, Ilunion condonará a Apta el préstamo participativo de medio millón de euros que había concedido al centro especial de empleo. El acuerdo también incluye la reducción a la mitad de la renta que Apta paga a Ilunion por el alquiler de las instalaciones del Piles y la prolongación del arrendamiento por un plazo de 15 años, al término del cual Apta tendrá una opción de compra a la que está vinculada una parte de las rentas que pague a Ilunion durante ese periodo.
Ilunion (antigua Fundosa) fue el sostén económico de Apta en los últimos años, aportando más de 13 millones de euros para cubrir pérdidas pero quedándose a cambio con la propiedad de las instalaciones del centro especial de empleo tanto en el Piles como en Roces. En cuanto a la nave de Roces, Ilunion permite su uso por Apta, aunque sin mediar contrato, situación que previsiblemente se mantendrá, según se informó ayer en la asamblea.
Además de las condiciones económicas, los gestores de Apta destacaron como un logro crucial en la negociación que mantendrán otro tipo de respaldos por parte de la ONCE claves para evitar la pérdida de clientes: Por un lado, Ilunion va a duplicar y ampliar el plazo de las pólizas de garantía que tiene concedidas a Apta y que le permiten afrontar los pagos a los proveedores. Haberlas perdido habría supuesto, según el administrador de Apta, haber perdido clientes por temor a que el centro especial de empleo no pudiera cumplir con los pedidos por problemas de liquidez ante sus proveedores. Por otro lado, Ilunion seguirá permitiendo que Apta destaque durante un tiempo en su oferta comercial que sigue contando con la colaboración del grupo empresarial de la ONCE y además del uso de su imagen también les seguirán asesorando desde sus equipos jurídicos y financieros, además de mantener el apoyo de la red comercial de Ilunion en Levante.
En la asamblea, Yanes desveló que la oferta inicial de la ONCE, cuando en septiembre anunció su intención de abandonar el accionariado de Apta, se ceñía a aportar 2,7 millones de euros condicionado a que se emplearan para cancelar todos los préstamos que tenía Apta y que estaban avalados por Ilunion. Esos préstamos ascienden a unos dos millones de euros, con lo que la liquidez que la ONCE habría dejado en Apta, si ese hubiera sido el acuerdo, se limitaría a unos 700.000 euros. Esa opción habría acabado abocando a Apta a entrar en un concurso de acreedores para su liquidación y el envío al paro de sus 171 trabajadores, 140 de ellos discapacitados, tras un ERTE en el que buena parte de la plantilla consumió sus prestaciones de desempleo.
