Carmen Moriyón lo dejó ayer claro: es imposible que la parcela liberada de las vías, conocida popularmente como el "solarón", se quede para siempre como un pulmón verde en la zona centro. "Como parque y como zona verde de expansión la quisiéramos todos porque es calidad de vida. Pero hay un compromiso de resolver la estación de ferrocarril y eso está consensuado por tres administraciones. Claro que queremos un 'Central Park' pero tenemos que ser conscientes de nuestras responsabilidades. No va a llegar el Estado para decir que se hace cargo del dinero de la obra sin sacar nada de la venta de terrenos", recalcó la Alcaldesa.

Hizo así hincapié en lo que está contemplado en el plan de vías: buscar financiación para la integración ferroviaria a través de la venta de parcelas liberadas de las vías para su edificación. Asimismo, Moriyón negó el estado de abandono que denuncian los vecinos de la zona, que se quejan del aspecto de la zona verde, con un césped completamente seco. "No está abandonado. Queremos que se venda pronto pero las cosas son complicadas en los mercados y más si no hay gobierno, porque entonces no hay reuniones del consejo de administración (de Gijón al Norte, sociedad gestora del plan de vías) y no planteamos lo que hay que hacer para solucionarlo", explicó la Alcaldesa, que también defendió la ubicación en el "solarón", este fin de semana, de la romería de la sidra. "Obedece a una actuación puntual que pidieron los hosteleros del barrio de la sidra, a partir de ahí no hay más peticiones ni nada más hablado", recalcó.

Pero bien diferente es el sentir de los vecinos de los alrededores y de los usuarios de un espacio que, oficialmente, lleva el nombre de los Jardines del Tren de la Libertad. En la zona centro y en el barrio de Laviada, la polémica está servida, pues desde hace semanas permanece el debate sobre el uso de este espacio dependiente del plan de vías. Entre las quejas por su mal estado, se ha alzado la reclamación de que se mantenga como parque para siempre.

La parcela, que está a la espera de ser comprada por constructoras, se usará desde este jueves hasta el domingo para celebrar la romería del Festival de la Sidra Natural, algo que no le hace mucha gracia a algunos ciudadanos. "Es una vergüenza que vayan a hacer esto. Van a estropear el terreno", comenta Javier Rodríguez, vecino del barrio de El Carmen. "No tiene sentido que realicen esto, deberían de hacer un uso correcto del espacio. Además el terreno necesita mantenimiento", añade.

"No me hace mucha gracia que se celebre aquí. Encima el prao no está muy cuidado, aunque por lo menos está segado", mantiene, por su parte, Dolores Calleja. Cristina Becerril, otra residente en la zona, manifiesta que "me parece mal que se vaya a hacer aquí, pues molesta a mucha gente y va a estropear el césped". Bajo su punto de vista, los Jardines del Tren de la Libertad "deberían ser zona verde, con un espacio cerrado para perros, fuentes decentes y parque infantil".

Ciertamente, entre las personas de la zona no son pocos los que opinan como Cristina Becerril. "No me parece mal que se haga la fiesta aquí, pero dejando espacio para los perros", explica Luis Giganto, que acude diariamente con su mascota al recinto. "El espacio no está bien cuidado, si fuera así habrían puesto una valla", añade. "Creo que esto debería ser una parque infantil y para perros. Ya hay muchos edificios, incluso algunos vacíos", añade, por su parte, Daniel González, otro habitual de los paseos con perro por la zona verde, ahora muy amarilleada por la falta de riego.

Aunque son muchos los que proponen que el espacio sea usado para los canes, algún vecino no está de acuerdo. "No soy muy amante de los animales, muchas personas no recogen los excrementos", explica Celestino Álvarez. Otros, sien embargo, apuestan por una doble solución. "Esto se hizo con un propósito, por lo que creo que una parte del terreno debería estar destinada para edificios. La otra parte no me importaría que fuera una zona verde. Eso sí, estando controlada", declara Benedicto Peláez.

Melania Fraga, otra vecina, se muestra algo más original. "Debería ser un espacio autogestionado por los vecinos. No tiene que haber edificios en él, ya hay demasiada especulación inmobiliaria", propone. La petición de un gran parque reina en el vecindario, pero se peleará con la idea de las administraciones.