Con esta iniciativa, cada kilo de vidrio que se recicle en los contenedores rosas situados en la Plaza Seis de Agosto, en la Plaza de Los Fresnos y en la Calle Poeta Ángel González, se cambiará por un euro que irá destinado a la investigación del cáncer de mama. Este proyecto tiene una doble función: de un lado, apoyar la lucha contra esta enfermedad y, de otro, incentivar el reciclaje de vidrio en la población gijonesa.