Una mujer de 50 años resultó herida de consideración ayer, alrededor de las cuatro de la tarde, al ser atropellada en un paso de peatones situado en la confluencia entre las calles Emilio Tuya y Aquilino Hurlé. Al parecer, y según relataron testigos presenciales de los hechos, la mujer salió despedida varios metros tras recibir el fuerte impacto del coche de un taxista que circulaba por la zona y que, presumiblemente, no se percató de su presencia en el paso de peatones.

Hasta el lugar del atropello se desplazaron sanitarios de emergencias médicas así como agentes de la Policía Local de la ciudad. Los funcionarios municipales serán ahora los encargados de elaborar un atestado en torno a lo sucedido, que será enviado al juzgado de instrucción de guardia. Tal y como informó ayer una portavoz municipal el taxista arrojó un resultado negativo en las pruebas de alcoholemia a las que fue sometido. La herida, por su parte, fue trasladada de urgencia al hospital de Cabueñes, en donde ingresó con varios traumatismos en el cuerpo.

En el momento del suceso la mujer se dirigía a un hotel situado a escasos metros del lugar del accidente para incorporarse a trabajar. "Es un cruce muy peligroso, aquí hay atropellos y accidentes cada poco porque no hay semáforo y a veces los coches van como locos", señaló poco después del atropello uno de los compañeros de la herida, aún conmocionado por lo sucedido. No fue el único. Los vecinos de la zona mantienen que la existencia en el cruce de estas dos vías -Aquilino Hurlé y Emilio Tuya-, de una señal de "ceda el paso" hace que se produzcan siniestros protagonizados por quienes no respetan la preferencia de paso.

Se da la circunstancia que este es el segundo accidente grave que se produce en la ciudad en los últimos tres días después de que el pasado domingo la colisión entre una furgoneta y un taxista en un cruce de El Llano dejara dos conductores heridos, uno de ellos un repartidor que tuvo que ingresar en el Hospital Universitario Central debido a la gravedad de sus lesiones.