La sección octava de la Audiencia Provincial de Asturias, con sede en Gijón, juzgará mañana, a las 10.30 horas, a un hombre acusado de aprovecharse de la discapacidad psíquica de dos menores para mantener relaciones sexuales completas con ellas. La Fiscalía pide para él una pena de 18 años de prisión por un delito de abuso sexual.

Según narra la acusación pública, el Ministerio Fiscal sostiene que "el procesado, durante los primeros meses del año 2015, mantuvo relaciones sexuales completas en al menos tres ocasiones con una menor, nacida en noviembre de 1997 y con una discapacidad psíquica del 48% (que le impedía conocer y consentir el alcance de los hechos), aprovechándose de la amistad que tenía con su madre".

Los presuntos abusos "se produjeron en el domicilio de la niña, al que el acusado entraba cuando sabía que la menor se encontraba sola, aprovechando que tenía la llave". Además, "durante el mismo periodo mantuvo relaciones sexuales completas al menos en dos ocasiones con otra menor, nacida en 2000, amiga de la primera y también con discapacidad psíquica, con adaptaciones curriculares en el ámbito educativo y dificultades de comprensión de normas sociales, circunstancias de las que se prevalió el procesado".

El procesado ya fue condenado en 2011 por dos delitos de exhibicionismo, con víctima menor, aunque esta pena ya está extinguida y es no computable a efectos de reincidencia.

La Fiscalía considera que los hechos son constitutivos de dos delitos de abuso sexual continuado y solicita que se condene al acusado a dos penas de 9 años de prisión (total, 18 años), inhabilitación para el ejercicio del derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de condena, alejamiento de cada menor y prohibición de comunicación durante 10 años, costas procesales y pago de una indemnización a cada una de las víctimas de 2.000 euros.