Es una evidencia constatable que la educación en España ha mejorado en cantidad y calidad. Pero se puede verificar también algunos datos preocupantes, porque aún persisten deficiencias educativas entre los más jóvenes, como se prueba por la alta tasa de abandono escolar, la repetición de curso, o el número considerable de alumnos que no logra el título en educación secundaria, lo que supone una grave obstáculo para su futuro profesional. Según datos fiables pero no definitivos ni mucho menos, en el proceso educativo de los alumnos influye la preparación de los padres, especialmente de las madres, de forma directa. El que las familias tengan mayor poder adquisitivo y los progenitores titulación universitaria influye sin duda en una mejor disposición de los hijos a superar con éxito los estudios, pero no es definitivo, ni mucho menos, porque son muchos los profesionales hijos de padres ni universitarios ni con alto poder adquisitivos que han logrado alta capacitación con sacrificio, entrega y generosidad y con ayudas justas en forma de becas y otras medios. La historia está llena de sabios de origen humilde.

En el proceso de educación integral de los alumnos, la madre ocupa un lugar clave y definitivo, porque actúa o debe hacerlo en una de las etapas más importantes del hijo, la infantil. Son muchas las madres que se implican de forma activa en la educación de los niños, más que los padres. El hogar, sobre todo las madres, juega un papel clave en la educación, papel que no puede ser transferido de forma global a la escuela. Es evidente que el ascenso de las mujeres a los títulos universitarios ha mejorado muy positivamente la educación de los hijos. Según datos, los alumnos de 15 años con madre universitaria logran mejores puntuaciones en las pruebas objetivas. Otro dato interesante que demuestra el papel de la mujer en la educación, es que es mayor el número de chicas que obtienen el graduado escolar. Las mujeres están tomando el mando en la educación. Su acceso a los estudios no deja de aumentar y su rendimiento es superior a los varones: tanto en las titulaciones medias como superiores el número de mujeres no deja de crecer en relación con los varones, aunque en algunas titulaciones como las técnicas el número de mujeres se menor. Es evidente que el mayor acceso de la mujer a la educación, cultura y relevancia social es el mejor antídoto para contrarrestar algunas ideologías que la manipulan, desprecian y alienan, con el pretexto de su liberación.