Quieren alejarse "de la imagen de porretas y de las rastas" y reivindicar "el uso responsable" del cannabis desde su local del barrio de La Arena, en Gijón. De hecho, ya están volcados en organizar el próximo 10 de junio un evento sin precedentes en la región y pionero en el noroeste de España: el encuentro cannábico internacional "The WeedKend" (un juego de palabras con "weed" y "weekend", que en inglés significan, respectivamente, "hierba" y "fin de semana").

La villa de Jovellanos se convertirá así por un día en epicentro de las reivindicaciones a favor de la marihuana. Un movimiento "en auge en la región" y en el que el Cannabis Interior Social Club (CISCA) de Gijón destaca por sus iniciativas, como "The WeedKend". En este encuentro de junio, la discoteca El Jardín albergará "charlas divulgativas y exhibiciones con el fin de normalizar y dar visibilidad a este sector emergente". No se tratará de un evento donde se podrá consumir cannabis, dado que la ley actual no lo ampararía, sino que tendrá un carácter divulgativo.

Donde sí se consume marihuana de diferentes formas y a lo largo del año es en el local de CISCA, en la calle Aguado. Allí se aprovechan de los huecos que deja la ley para poder consumir juntos y compartir el producto, en un ámbito privado y sin ningún ánimo de lucro, según aclaran los directivos del club. Algo permitido, puesto que lo que está sancionado o penado es el consumo en la vía pública, así como la plantación y tenencia de cannabis con ánimo de lucro. Pero, además de lugar de consumo, CISCA está incrementando su actividad reivindicativa.

"Nuestro club no es un fumadero. Mucha gente de la que viene no puede fumar, viene con cáncer de pulmón y consume cannabis de otra forma, puesto que lo necesitan. Esto no tiene nada que ver con la visión de fumar porros. No es un sitio donde la gente viene sólo a fumar y está lleno de humo. Se trata de aconsejar sobre una sustancia que está de verdad en la sociedad aunque no esté normalizada. Aquí vienen arquitectos, médicos y todo tipo de gente, de todas las edades y procedencias distintas, que se junta para compartir su conocimiento en torno al cannabis", aclaran Germán González e Iván Roche, presidente y secretario de CISCA.

Mucho más que fumar

¿Y a qué se refieren con un consumo más sano y responsable de la marihuana? "Realmente, lo nocivo no es la sustancia en sí sino el tipo de consumo. En el caso de la combustión (fumar), es nociva por todas las sustancias que derivan de la propia combustión. Inhalar humo no es bueno de ninguna manera. Por eso, desde CISCA recomendamos formas de consumo más sanas para el organismo. Esto pueden ser las tinturas de aceite cannábico, las infusiones o la vaporización, en caso de ser administrado por vía pulmonar", explican desde CISCA.

El club gijonés "es una asociación cuyo objetivo es unir a los usuarios de cannabis de Gijón, ofreciendo información veraz y contrastada sobre los beneficios y riesgos del uso de la sustancia y busca ser una más de las asociaciones que hay en el país que persiguen la regulación del cannabis". A lo que agregan: "Consideramos que es injusto que esta actividad no esté regulada ya que no hacemos daño a nadie realizando un consumo responsable en un ámbito privado".

Petición de regular la marihuana

Sus directivos añaden más argumentos a favor de legalizar la marihuana. "Encontramos mucha incomprensión social respecto al cannabis. Por suerte, es una situación que está cambiando en los últimos años, especialmente en las nuevas generaciones. Es curioso ver cómo es socialmente aceptado el consumo de alcohol y llevamos a los niños a bares desde muy pequeños. Y, sin embargo, está criminalizado el uso del cannabis. Afortundamente, según las encuestas, una gran parte de la población está a favor de la regulación. Por eso, donde más desamparo encontramos es en la instituciones", recalca Iván Roche.

Además, CISCA recuerda que el consumo de cannabis en el ámbito privado no es ilegal. "En todos los países occidentales, lo que es legal se regula. Y si el consumo de cannabis es legal, y hay muchos usuarios que utilizan la sustancia, no deberían encontrarse en esta indefensión jurídica causada por vacíos legales", argumentan a favor de la legalización de la marihuana en España.

De hecho, CISCA está intentando moverse para contactar con partidos políticos. Esta misma tarde se reunirán con el diputado autonómico de Podemos Enrique López. El objetivo del colectivo sería impulsar una proposición no de ley sobre esta materia "para la regulación del cannabis terapéutico, al igual que está sucediendo con nuestros vecinos de Cantabria".

El club gijonés

CISCA cuenta en la actualidad con 89 socios, de los que 29 son terapéuticos y sufren enfermedades como fibromialgia, esclerosis o cáncer. "Ser socio da derecho el uso y disfrute de las instalaciones, además de a todas las actividades que realizamos. Es un lugar donde compartir información que no está disponible en los canales públicos habituales. Los usuarios también disponen de un servicio de asistencia jurídica gratuita gracias a nuestros compañeros de S&F Abogados y también realizamos actividades que no tienen que ver directamente con el cannabis, como talleres de guitarra, charlas literarias, campañas benéficas, sesiones de cine... Cualquier actividad que sirva para enriquecer la mente", explican los directivos del club gijonés, que está constituido como colectivo plenamente legal, con estatutos aprobados hace tres años, inscripción en el registro nacional de asociaciones y CIF.

El mercado negro

El mayor problema al que se enfrentan es la provisión de cannabis para el consumo en su local. "Lo que está prohibido es la venta, no la compra. El usuario que la compra no estaría cometiendo un delito, como mucho podría sufrir una sanción administrativa por tenencia en la vía pública, pero no un delito por realizar una compra. Lamentablemetne desde septiembre de 2015 se ha creado un marco jurídico mucho más inseguro para los usuarios de cannabis, penalizando aún más la tenencia, el transporte y el autocultivo. Actualmente, no nos queda otra opción a los usuarios que acudir al mercado negro. Exponiéndonos así a toda la inseguridad jurídica que ello conlleva", lamentan desde CISCA.