"Es la demanda más clásica contra los planes de empleo: la necesidad de que haya planes de empleo privados, dar dinero a las empresas, pero manteniendo los municipales". Así explicó ayer Pelayo Barcia, director general de Empleo del Ayuntamiento de Gijón, el nuevo programa impulsado por el consistorio gijonés, recogido en el acuerdo "Gijón Crece 2016-2019": la creación de un plan de empleo público-privado dotado con 600.000 euros al año, en una convocatoria plurianual.

Este convenio, dirigido a empresas y asociaciones empresariales, pretende dar cobertura a "oficios que desde el Ayuntamiento no podemos ofrecer dentro de los planes de empleo municipales", como indicó Ana Braña, concejala de Hacienda, siempre que "sea novedoso y que se pruebe la difícil cobertura del puesto", apuntilló Barcia.

De esta forma, los proyectos presentados habrán de garantizar, cada uno, una formación para quince beneficiarios y, a posteriori, la contratación de al menos cinco de ellos.

Con ello, el coste para el Ayuntamiento "será el mismo" que el de un trabajador adherido a los planes de empleo municipales ordinarios, es decir, 20.000 euros, con la salvedad que la empresa, con ese montante, habrá de costear, tanto la contratación de un trabajador como la formación de los restantes. Así, las cuentas realizadas por el Ayuntamiento confían en sumar una treintena de nuevos empleos, de un año de duración, y hasta noventa personas recibirán formación. "Por el mismo precio se consigue un impacto mayor, ya que se consiguen contrataciones y, además, se genera formación", aseguró Barcia.

"Los adjudicatarios firmarán un convenio en el que las empresas irán con nombre y apellidos, controladas como si de una ayuda a la contratación ordinaria se tratara: obligación de mantener la plantilla, no despedir a gente para contratar a estos o comprobar que no haya deudas con la administración", relató Barcia, "si no se cumplen los objetivos, como cualquier subvención se revocará", con lo que el proceso será muy similar al de los planes de empleo municipales ordinarios. De hecho, incluso "se puntuará más los que cuenten con colectivos de difícil integración", argumentó el director general de Empleo.

Se prevé que el periodo de formación pueda dar comienzo en septiembre u octubre de este año y que las contrataciones se lleven a cabo a finales de este 2017 o principios del año próximo. Para el próximo ejercicio, se reservará una partida presupuestaria igual.

Además, en la Junta de Gobierno celebrada en la mañana de ayer se aprobó una línea de ayudas para la mejora de las áreas empresariales. "Las ayudas a polígonos tradicionales, que se gestionaban antes desde el Centro Municipal de Empresas, pasará ahora a hacerse desde el propio Ayuntamiento", aseguró Ana Braña, con un valor total para el consistorio de 90.000 euros.