Había mono de sol y playa. Tras varios días consecutivos con el cielo encapotado e incluso con rayos y truenos, los gijoneses y visitantes de nuestra ciudad están pudiendo disfrutar hoy por fin de una jornada calurosa.

Aunque los termómetros repartidos por la ciudad llegaron a marcar los 27 grados, la máxima temperatura del día registrada por la estación de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) se ha quedado por ahora en los 25,4 grados. En cualquier caso, más que suficiente para que centenares de bañistas se acercasen a los arenales del litoral gijonés.

De hecho, los únicos perjudicados por la llegada del calor a Gijón son aquellos turistas que vienen huyendo a propósito de temperaturas elevadas de sus localidades de origen y que se manifestaban, incluso por redes sociales, encantados con el cielo nublado asturiano de estos días de atrás. Nunca llueve a gusto de todos, pero, aún así, los 25 grados de Gijón son mucho más soportables que los más de treinta de otras zonas de España.