El sacerdote jesuita Gumersindo Treceño Llorente ha fallecido esta mañana a los 104 años en Salamanca, donde descansaba en la residencia de la Compañía de Jesús desde 2015. Era el decano de la misma en España tras 88 años como jesuita y 75 de sacerdote. De entre todos sus destinos, con el que más vinculación tuvo fue con el colegio de La Inmaculada de Gijón, al que, de una u otra forma, estuvo ligado durante 71 años.

Muchas promociones guardan recuerdos del padre Treceño. De hecho, fue Consiliario Honorifico de la Asociación de Antiguos Alumnos del centro. Nacido el 2 de enero de 1913 en Mansilla Mayor (León), era miembro de una familia de labradores formada por 8 hijos (5 varones y 3 mujeres). Llegó a Gijón al Colegio de la Inmaculada en el año 1944, como profesor de francés, la materia que siempre impartió, juntó a la de Apologética (Religión) durante algunos años.

También desempeñó los cargos de inspector de los estudiantes internos y de encargado de los asuntos prácticos de la comunidad de jesuitas (padre ministro). Desde 1944 sólo se ausentó del centro educativo de la villa de Jovellanos entre 1955 y 1960, cuando estuvo destinado en el Colegio Apóstol Santiago de Vigo. En el año 2015, ya con 102 años, se trasladó a Salamanca para reposar y cuidar su salud.

La misa exequial será mañana lunes 16 de octubre a las 11.00 h. en la capilla de San Estanislao de la comunidad jesuítica en Salamanca.