Las personas con discapacidad auditiva tienen a su disposición dos nuevas herramientas que les facilitarán su relación con la administración. El Ayuntamiento acaba de contratar con la Fundación Padre Vinjoy la prestación de un servicio de interpretación de lengua de signos para todas las personas que lo precisen a la hora de relacionarse con las administraciones públicas o de realizar trámites de carácter particular en el territorio de Gijón.

Para ello, será necesario solicitar el servicio cuando se necesite directamente a la Fundación Padre Vinjoy, que designará en cada caso un intérprete al usuario para que lo acompañe en sus trámites. El contrato tendrá una duración de un año y un coste de más de 36.000 euros, si bien, como indicaba Adolfo Rivas, de la Fundación, podría ampliarse para dar una cobertura gratuita y universal a las personas que no oyen.

En el caso de quienes utilicen audífonos o implantes cocleares, ya disponen de siete sistemas compactos de bucle magnético en otras tantas oficinas de atención a la ciudadanía del Ayuntamiento. Estos sistemas, normalizados a nivel mundial, facilitan la audición al eliminar los problemas de mala acústica por el ruido de fondo, la reverberación o la distancia entre los interlocutores. "Ahora podremos oír mejor, porque antes oíamos todo menos lo que nos estaban diciendo en las oficinas con mucho ruido de fondo", explicaba ayer Ángel Serrano, presidente de la asociación de implantados cocleares.

Los bucles funcionan con la emisión de señales magnéticas inalámbricas que son recogidas por los audífonos de forma directa, y ya están instalados en la Antigua Pescadería Municipal y los centros municipales integrados de El Coto, La Arena, Pumarín, El Llano y La Calzada, así como en el edificio administrativo Antiguo Hogar. Los puestos de atención al público dotados con este bucle están debidamente señalizados, y los funcionarios atenderán de manera individualizada a quien así lo precise.