Un hostelero gijonés vinculado a la parroquia de La Guía ha sido condenado a cuarenta días de trabajos en beneficio de la comunidad por un delito de lesiones después de agredir a su pareja sentimental tras una discusión entre ambos este pasado fin de semana. La condena incluye la prohibición de acercarse o comunicarse con la mujer durante los próximos cuatro meses. El implicado -que responde a las iniciales F. J. A. H., tiene 54 años y antecedentes de la misma índole- aceptó esta pena impuesta ayer por la magistrada del Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 1 de Gijón tras tomar declaración a ambos implicados. La pareja comparte trabajo en el mismo local hostelero.

Los hechos encausados ocurrieron el pasado domingo en la vivienda de la pareja. próxima al establecimiento hostelero que el condenado regenta. Lo que comenzó siendo una discusión verbal entre ambos tornó en un momento dado en una agresión en las dos direcciones. Los gritos provenientes del interior de la vivienda de la pareja alertaron a uno de sus vecinos que optó por poner los hechos en conocimiento de la Policía Nacional. Hasta La Guía se desplazó rápidamente una dotación que constató, en efecto, que la mujer acabó con lesiones leves. Es por ello que los agentes comisionados procedieron a su detención para tomarle declaración en la Comisaría de El Natahoyo, antes de trasladarle al Palacio de Justicia de Gijón.

En la mañana de ayer, F. J. A. H. pasó a disposición judicial para declarar ante la magistrada del Juzgado de Violencia de Gijón. Tras la exposición de los hechos aceptó una condena por un delito de lesiones de cuarenta días de trabajo en beneficio de la comunicación y cuatro meses de alejamiento, que incluye la prohibición de acercarse y de comunicarse con ella.

Pero esta no es la primera vez que el hostelero gijonés pasa por esta misma situación. Ocurrió en el año 2014, durante el mes de julio. También entonces fue condenado por un delito de lesiones perpetrado contra su pareja. En aquella ocasión también se conformó con una condena a veinte días de trabajos en beneficio de la comunidad y la prohibición de acercarse y comunicarse con su víctima por tiempo de ocho meses. Una pena que cumplió, según fuentes judiciales, sin quebrantamientos conocidos de ningún tipo.

En 2017 se presentaron en Asturias 2.711 denuncias, de las que fueron víctimas 2.505 mujeres. Además se incoaron en Asturias 822, de las que resultaron adoptadas 566, lo que supone el 69% de ellas.