La intervención de Rusia en el conflicto de Siria podrá reducir la propagación del terrorismo y ayudar a lidiar con el autodenominado Estado Islámico (EI) en el país, devastado por la guerra, dijo el sábado el ministro egipcio de Exteriores, Sameh Shoukry.

Sin embargo, el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, calificó de "inaceptables" los ataques aéreos del Kremlin en Siria, y advirtió de que Moscú podría quedar aislada en la región.

En este contexto, el primer ministro británico, David Cameron, ve posible lograr el consenso necesario en el Parlamento para aprobar una extensión a Siria de los ataques contra el grupo yihadista que el Reino Unido ya está llevando a cabo en Irak.

El Estado Mayor ruso aseguró ayer que su aviación había destruido en las últimas 24 horas otros diez objetivos del grupo terrorista Estado Islámico (EI) en Siria y logrado cortar la línea de suministros de armamento con destino a los yihadistas.