Un grupo rebelde vinculado al Ejército Libre Sirio (ELS) reivindicó ayer el asesinato del dirigente de Hezbolá Samir Qantar en Damasco, la capital siria, y negó que el autor haya sido Israel, como afirmó el domingo el grupo chií libanés.

En un vídeo publicado en Youtube, cuya autenticidad no pudo ser comprobada, la denominada Brigada de la Misión Secreta en la capital Damasco se atribuyó el asesinato de Qantar y de sus acompañantes en "una operación de precisión", que llevó a cabo en cooperación con la Brigada de los Caballeros de Huran.

"Negamos lo dicho por Hezbolá de que fuera un ataque de aviones sionistas", en referencia a Israel, indicó un portavoz de la organización insurgente siria, que sigue a la sala de operaciones del Ejército Libre Sirio en Damasco y su periferia.

El rebelde, que apareció en una sala rodeado de miembros de su grupo pertrechados con armas, señaló que "las alegaciones del Partido de Satanás (en alusión a Hezbolá, que significa Partido de Dios) no es más que un intento de minar los espíritus de los guerrilleros del ELS y elevar la moral de su mercenarios".

Por último, el portavoz insurgente advirtió a Hezbolá que está siendo vigilado y que no sobrevivirá a golpes futuros. Hezbolá y la televisión siria revelaron el domingo que Qantar había muerto la noche anterior en un bombardeo de la aviación israelí contra la zona de Yaramana, en la periferia de Damasco.

Pocas horas después de conocerse su muerte, tres cohetes fueron lanzados desde la región meridional libanesa de Tiro contra el norte de Israel, según confirmaron fuentes militares de ambos países.

En respuesta, Israel bombardeó varias zonas del sur del Líbano y aviones del Ejército israelí violaron el espacio aéreo libanés y realizaron varios vuelos rasantes y ataques simulados en las zonas desde donde fueron disparados los obuses.

Qantar, de 53 años, fue condenado a cadena perpetua en 1979 en Israel por haber participado en el asesinato de un policía y dos ciudadanos israelíes y estuvo preso casi tres décadas antes de ser liberado en 2008 en un canje entre Hezbolá e Israel.

El pasado septiembre, el Departamento de Estado de EE UU incluyó en su lista de terroristas a Qantar, quien, hasta su liberación en 2008, era el preso libanés que más años llevaba en las cárceles de Israel.

Hezbolá es uno de los aliados principales del régimen de Bachar al Asad y ha enviado milicianos al territorio sirio que luchan junto al Ejército Nacional.

Entre tanto, al menos 18 miembros del grupo terrorista Estado Islámico (EI) murieron ayer y otros siete resultaron heridos durante varios bombardeos aéreos de la coalición internacional liderada por EE UU sobre la ciudad de Mosul y su periferia, en el norte de Irak, informaron a "Efe" fuentes kurdas en la zona.

Paralelamente, el ministro francés de Defensa, Jean-Yves Le Drian, efectuó ayer un viaje de trabajo a Moscú en el que tenía previsto abordar con su homólogo ruso, Serguéi Shoigú, la cooperación en la lucha contra los yihadistas del Estado Islámico.