Naciones Unidas dio comienzo ayer en Ginebra a las primeras conversaciones de paz sobre Siria que se celebran en dos años. Aunque algunas fuentes a hablaron abiertamente de "fracaso" en las primeras horas por la ausencia de la oposición al régimen de Asad, finalmente los opositores, reunidos en Riad, la capital saudí, anunciaron por la tarde que se suman a la ronda de diálogo. Entre tanto, Holanda anunció que se suma a los bombardeos sobre Siria de la coalición encabezada por Estados Unidos.