El presidente de EE UU, Donald Trump, concluyó ayer en un tuit que los esfuerzos de China y su presidente, Xi Jinping, para contener al régimen de Corea del Norte "no han funcionado", aunque mostró su reconocimiento hacia Pekín. Corea del Norte será el eje del primer diálogo de seguridad y diplomacia entre EE UU y China, que hoy, miércoles, se celebrará en Washington.

"¡Al menos sé que China lo ha intentado!", escribió Trump tras el fallecimiento, el lunes, del joven estudiante estadounidense Otto Warmbier, de 22 años, quien fue repatriado en coma la semana pasada desde Pyongyang, donde estuvo preso casi año y medio.

En apariencia, la muerte de Warmbier ha causado un profundo enfado al inquilino de la Casa Blanca. "Es una vergüenza total lo que le pasó a Otto. Nunca se debería haber permitido que ocurriese. Y, francamente, si se le hubiera traído a casa más pronto creo que los resultados habrían sido muy diferentes", comentó Trump a los periodistas en el Despacho Oval antes de iniciar una reunión con el presidente ucraniano, Petró Poroshenko.

Warmbier viajó a Corea del norte como turista desde China hace año y medio, en las Navidades de 2015, para pasar un fin de año "diferente". Cuando el 2 de enero de 2016 se disponía a abandonar el país, las autoridades norcoreanas lo detuvieron bajo la acusación de haber intentado sustraer un cartel de propaganda política.

Meses después, lo condenaron a quince años de trabajos forzosos en un campo de concentración, aunque la semana pasada le liberaron "por razones humanitarias", ya que, por razones que no han sido aclaradas de modo convincente, entró en coma poco después de ser condenado.

El régimen de Corea del Norte sostiene que Warmbier sufrió un brote de botulismo y que le dieron una pastilla para dormir, pero no volvió a despertarse, algo que su familia considera falso.