Langreo, L. M. D.

La Fiscalía solicita una pena de 21 meses de prisión, retirada de permiso de conducir durante cuatro años y 12 días de localización permanente al conductor de un taxi al que se acusa de conducción temeraria en La Felguera y de pegar un puñetazo en la boca a un hombre que viajaba en otro vehículo, y con el que había tenido una discusión previamente.

Según el escrito de la Fiscalía, los hechos ocurrieron el 7 de abril de 2011. El acusado, que conducía un taxi, tuvo una discusión con los ocupantes de otro vehículo en una rotonda. Los siguió hasta el polideportivo Juan Carlos Beiro, donde estaban aparcando. «Sin mediar palabra» propinó a uno de los ocupantes un puñetazo que le produjo contusión facial y rotura parcial de un diente. Acto seguido pasó junto al cuartel de la Guardia Civil, desde donde los agentes lo vieron «circular por el carril izquierdo, rebasando a los vehículos detenidos en la intersección». Uno de los guardias gritó para que parara el coche, sin conseguirlo. El taxista salió a gran velocidad por otro carril, se saltó un stop y se inició, con un vehículo de la benemérita, una persecución por La Felguera. El taxi, que circuló a gran velocidad, obligó a peatones y coches a apartarse a su paso. Finalmente, pudo ser detenido.

Por otra parte, el ministerio público pide una pena de un año de prisión y una multa de 1.800 para cada una de las dos mujeres a las que acusa de falso testimonio en un juicio celebrado en Pola de Laviana. Según la Fiscalía, las dos acusadas mintieron en su declaración para favorecer a una familiar a la que se juzgaba por agresión.