El Ayuntamiento de Langreo ha puesto en marcha los trámites para agilizar el derribo del viejo cuartel de la Guardia Civil de Langreo. El Consistorio ha enviado un requerimiento a la Gerencia de Infraestructuras y Equipamiento de la Seguridad del Estado (GIESE) -entidad dependiente del Ministerio del Interior- para que permita a los técnicos municipales acceder al inmueble, con el objeto de actualizar el estudio sobre la situación en la que se encuentra el edificio e impulsar el expediente de ruina para proceder a la demolición. Si Interior no da el paso antes y procede al derribo, el Ayuntamiento se encargará de tirar el edificio y repercutir los gastos al propietario, en este caso el Ministerio.
Después de que el Consistorio declarase la ruina del inmueble, la GIESE, por medio de una resolución, obtuvo una prórroga de dos años (que concluye en junio de 2016) para decidir si derribaba el edificio o procedía a su reforma. La idea del Ayuntamiento es poner e marcha los mecanismos administrativos a su disposición para acelerar el proceso. "Parece improbable que Interior quiera remodelar una instalación que está fuera de ordenación, cuando además ya tiene en funcionamiento el nuevo cuartel de la calle La Unión", aseguró alcalde de Langreo, Jesús Sánchez.
El regidor desgranó los pasos que seguirá a partir de ahora el Consistorio. Por el momento, se ha remitido un requerimiento por escrito a la GIESE para que la entidad permita el acceso al edificio de los técnicos municipales, con el objeto de que puedan elaborar un nuevo informe. En caso de que los trabajadores del Ayuntamiento no reciban permiso para entrar, se redactaría el informe técnico igualmente, basándose en las "evidencias" del mal estado en que se encuentra el inmueble.
Cascotes
Desde hace meses hay una red que circunda la instalación para evitar la caída de cascotes a la vía pública. "Cuando se hizo el primer informe ya estaba claro el estado de deterioro del edificio y es lógico pensar que, con el paso del tiempo, esa situación haya ido a más. En cualquier caso, vamos a pedir ese nuevo informe a los técnicos", argumentó el regidor langreano.
Con ese nuevo estudio en su poder, el Ayuntamiento pedirá a Interior acometa el derribo, dada la condición de ruina en la que se encuentra la instalación. Si el Ministerio se niega, será el propio Consistorio el que se haga cargo de la demolición, para repercutir posteriormente el coste a su propietario. El derribo del antiguo cuartel de la Guardia Civil de Langreo tiene un coste estimado de 60.000 euros, según los cálculos que maneja el Ayuntamiento. "Vamos a hacer lo que esté en nuestra mano para acelerar la demolición", expuso Sánchez, que tildó de "inexplicable" que se concediera una prórroga de dos años a Interior.
Los guardias civiles se trasladaron en marzo del pasado año al nuevo cuartel tras tres años de espera debido al desencuentro entre la Giese y Sogepsa (Sociedad Mixta de Gestión y Promoción del Suelo de Asturias) por el pago del IVA de la obra de la nueva instalación.
En los terrenos liberados por el viejo acuartelamiento, emplazado en Langreo Centro, que tienen 3.500 metros cuadrados, estaba previsto construir 230 viviendas tras el derribo.
