Salas, E. PELÁEZ

El Ayuntamiento de Salas ofrecerá a los peregrinos un nuevo albergue. Las quejas de aquellos que cubren el Camino de Santiago y que llegan a las dependencias municipales de la capital salense y de la asociación de Amigos del Camino de Santiago Astur-Galaico del Interior tienen respuesta del equipo de Gobierno municipal.

El concejal de Obras, Alberto Tejada, asegura que se han iniciado negociaciones para alquilar un bajo en la villa que se destinará a albergue de peregrinos. Confía en que se llegue a un acuerdo en breve que permita acondicionar el local y ponerlo en funcionamiento antes de 2010, que es Año Jacobeo. Estas dependencias sustituirán a la antigua cárcel, ubicada en los bajos del hogar del jubilado. «Es húmedo y poco amable, no tiene cocina ni sala de estar», señala el edil del edificio actual, que fue el primera albergue abierto en el concejo, hace quince años.

El municipio cuenta ahora con cuatro albergues, apunta Tejada. Dos de ellos son gestionados por la asociación Salas en el Camino, el emplazado en Godán y el ubicado en el monasterio de Cornellana, y otro, el de Bodenaya, es privado. «Este concejo tiene una oferta de albergues como ningún otro», dice el concejal haciendo hincapié en el número de plazas, que supera las cuarenta.

El Ayuntamiento de Salas ha constatado un incremento del número de peregrinos que llegan al concejo siguiendo el Camino de Santiago del interior. Un aumento que se ha notado durante todo el año y especialmente en la temporada estival. Las oficinas de turismo de Cudillero y Valdés confirmaron recientemente que había subido el número de consultas realizadas por peregrinos. Y ante el previsible incremento de los años jacobeos Salas quiere estar preparada para ofrecer un local en mejores condiciones que el actual.