El Franco/ Castropol, T. CASCUDO

Los concejos vecinos asisten con incredulidad a la insólita crisis política que vive el Ayuntamiento de Tapia a cuenta del proyecto aurífero de Astur Gold. Los alcaldes de El Franco y Castropol, los socialistas Cecilia Pérez y José Ángel Pérez, dicen ver con estupor la recusación del Alcalde tapiego, Manuel Jesús González Cuco (Alternativa por Tapia) -quien fue apartado del expediente por paralizar los sondeos iniciales de la empresa por una supuesta enemistad hacia Astur Gold- y las que pesan sobre los ediles Ernesto Maseda (ex edil socialista y ahora concejal no adscrito), María Antonia Fernández (APT) y Carmen López (APT). Los ecologistas quieren apartar a Maseda del expediente y Astur Gold, por su parte, a las dos concejalas.

Los dos alcaldes salen en defensa de su homólogo tapiego y reprochan a la empresa Astur Gold -que presentó tres de los cuatro incidentes de recusación- que «pretenda gobernar el ayuntamiento desde fuera».

«Lo que está pasando en Tapia es lamentable y estoy indignada». Es la opinión de la Alcaldesa franquina, quien considera que la empresa propietaria del yacimiento aurífero de Salave «se está equivocando en su comportamiento». Y añade: «No son formas, ni actitudes para dirigirse a un ayuntamiento; lo que debe hacer un empresa interesada en desarrollar un proyecto en un municipio es colaborar y cumplir con la tramitación que se le exige. Flaco favor le hace la empresa a Tapia actuando así».

A juicio de la alcaldesa el regidor tapiego sabe diferenciar una opinión personal de su labor al frente del Consistorio: «El Alcalde nunca dejó de estar en su sitio y creo que siempre ha sido respetuoso con la ley. Tiene absolutamente todo mi apoyo y creo que la que se está equivocando al máximo es la empresa. Si al Alcalde le toca dar una licencia la dará, pero tiene que ser exigente y riguroso con la tramitación».

De la misma opinión es el regidor castropolense, quien considera que lo que está ocurriendo en Tapia es «muy feo y muy desagradable». José Ángel Pérez reprocha a la minera que pretenda «gobernar un ayuntamiento desde fuera» y alerta sobre el peligro de la recusación: «Estoy sumamente preocupado con esta situación que abre un precedente muy peligroso para la administración local y para la independencia de los cargos públicos». E insiste: «El Alcalde, independientemente de lo que opina como persona, trabaja con respeto a sus obligaciones públicas y siempre cumpliendo la ley. Todos tenemos opiniones personales sobre cada tema y hay unas cosas que te gustan más y otras menos. Creo que no hay razón que posibilite esa recusación y temo que la estrategia de la empresa pueda generalizarse creando un problema muy serio para las administraciones locales».

Sobre el proyecto minero que el Principado ha comenzado a tramitar, Pérez ha mostrado «suma preocupación» por el hecho de que la balsa de estériles se ubique en las inmediaciones del núcleo de Brul, concretamente a 500 metros según el documento que ha elaborado la empresa. «Entiendo que el concejo de Castropol es uno de los más afectados pues tiene viviendas muy cerca de la zona de tratamiento y por lo tanto vamos a posicionarnos defendiendo a los vecinos y estudiaremos el proyecto en cuanto tengamos acceso a él», explica.

Desde El Franco también estarán «vigilantes». A Cecilia Pérez le preocupa el impacto medioambiental y no cree que la explotación minera vaya a ser «la panacea» para el paro comarcal.

Cecilia Pérez

José Ángel Pérez