Asturias lidera la ocupación del turismo rural en el puente de La Asunción en España con un 73% de sus plazas vendidas, según un portal de internet. Y el Parque Natural de Somiedo es buen ejemplo de ello. Sus parajes, flora y fauna, con el oso pardo cantábrico como emblema, y las actividades al aire libre son algunos de los valores que hacen que los turistas se dejen caer en alto número por el concejo suroccidental asturiano. Un concejo que es en su totalidad un parque natural que, además, este año está de aniversario, al cumplirse 25 años de la declaración.

Somiedo llega con buena salud a su cuarto de siglo de vida como área protegida. Pero paisaje aparte, la gastronomía de la zona, a base de carnes rojas y buenos guisos de cazuela, es otra razón más para elegir esta zona como destino vacacional. Al menos, según se atiende a la opinión de los turista.

Para Juan Ignacio Abella, de Madrid, el arte rupestre es lo que le ha llevado a esta parte de Asturias. En concreto al vecino concejo de Teverga. Pero se alojan en Somiedo. «Dada la economía, que está complicada, decidimos buscar un camping y el más cercano estaba aquí», señala. Y es que, tal y como dice, «hay muchas formas de irse de vacaciones». Pernoctar en el municipio ha hecho que él y su pareja se queden prendados de los bellos paisajes, «con sus impresionantes montañas y sus rutas interminables».

Pero si algo le ha sorprendido ha sido la gastronomía somedana: «Es una cosa buena de la zona, en cualquier sitio la comida es de calidad y la relación precio calidad es muy alta». La buena mesa también le hace a Antonio José Sánchez, de Huelva, querer quedarse en el municipio para siempre: «Está todo fenomenal dan ganas de quedarse más tiempo». Sánchez llega a Somiedo a través de unos amigos que tienen una segunda residencia en la zona y este verano les han invitado a pasar unos días con ellos. Y está impresionado con el paisaje que califica como «una maravilla».

Rodearse de montañas, valles y lagos no amarga las vacaciones a nadie. Tampoco a Ángeles de la Flor, de Madrid, que ha llegado a Somiedo para quedarse una semana con su familia: «Venimos por el paisaje y posibilidad de hacer una vida más sana».

Con los niños recorren los parajes suroccidentales para caminar, ver animales y disfrutar de paz y tranquilidad. Para De la Flor, un aspecto importante que ofrece el concejo es que «te permite hacer una vida cultural pero a la vez ligada a la naturaleza». Una oportunidad para recuperar «valores perdidos en la capital como la cercanía de la gente, la comida o la ecología de la zona».

Esa inquietud por rodearse de naturaleza ha hecho que Beatriz Rodríguez, de Sevilla, haya llegado a Pola de Somiedo con su pareja para disfrutar de unos días por la montaña. «La playa nos da igual y nos gusta andar por el campo y Somiedo es un sitio ideal», asegura Rodríguez, que explica que hacen muchas rutas a pie: «Buscábamos recorrer algunas nuevas y un cambio de clima».

Y es que los más de cuarenta grados que suele rozar la capital andaluza en agosto echan a cualquiera hacia el Norte. «Allí hace un calor insoportable y al final te pasas todo el día dentro de casa y no puedes hacer nada», declara Rodríguez. Entre senda y senda, la joven saca tiempo para sentarse frente a buenos y abundantes platos como «las carnes, que son excepcionales, y también las verduras».

Aunque ya sabían que en la zona el buen yantar está asegurado, porque «en Asturias se come bien en todos los sitios».

«Está todo fenomenal; dan ganas de quedarse más tiempo»

<Antonio José Sánchez >

Asalariado de Huelva

«Las carnes y las verduras son excepcionales; en Asturias se come bien»

<Beatriz Rodríguez >

Pianista de Sevilla

«Somiedo tiene impresionantes montañas y rutas interminables»

<Juan Ignacio Abella >

Parado de Madrid

«Venimos por el paisaje y por la posibilidad de hacer una vida más sana»

<María Ángeles de la Flor >

Empresaria de Madrid