Ni el frío ni la apretada agenda del mes de diciembre puede con la pasión por el bolo vaqueiro. El torneo individual de Santa Bárbara, última competición oficial de la temporada, puso el broche de oro a un gran año para el deporte autóctono con una participación de 42 jugadores que superó todas las previsiones.
La bolera de Rengos fue el lugar elegido para esta ya tradicional competición en honor la patrona de los mineros, una festividad muy especial para una comarca en la que este sector cuenta con un gran arraigo histórico y especial vinculación a la actividad bolística.
El principal atractivo de esta cita está en sus bases, pues los jugadores no pueden utilizar sus propias bolas y tienen que ceñirse a las que se encuentran en la bolera. Una característica que busca la igualdad de condiciones y que las diferencias se establezcan más por cuestiones de destreza que por el factor de fuerza o poderío físico. Aspecto este que favorece también la igualdad entre distintas generaciones de deportistas.
En lo relativo al formato, el campeonato se disputó a ocho boladas. El campeón fue el vigente campeón de Asturias, Álvaro Collar, que pasó por encima de todos su rivales con un total de 589 bolos. Su más inmediato perseguidor fue su primo Javier de la Mata, integrante de la peña Josber al igual que el campeón, que totalizó 567 tantos. Completó el podio el jugador de la peña Villacanes David Membiela, con 564 bolos.
El nivel general de los participantes fue bastante alto, pues hubo hasta una docena de jugadores que superó los 500 bolos. Entre los diez primeros se colaron en esta ocasión Iván Pérez (Bimeda), que fue cuarto, seguido por Alfredo (Degaña), Segundo López (Rengos), Tino Maradona (Cerredo), José Abel (Bimeda), David (Genestoso) y César Gómez (Villacanes).
Como es habitual en esta cita, los premios para los primeros clasificados fueron en especia. El campeón se llevó a su casa un jamón donado por la peña Rengos. Javier de la Mata se llevó un surtido de quesos de Alimentos Muniellos, mientras que David Membiela fue recompensado con una cesta de Navidad de la Asociación de Bolo Vaqueiro. Iván Pérez y Alfredo completaron la lista de premiados con respectivos estuches de vinos y licores donados por el Disco-Bar La Descarga y Vinos La Muriella.
Una vez finalizada la entrega de premios tuvo lugar una merienda de confraternización, en la que participaron también representantes de la organización, a cargo de la Sociedad de Festejos Santa Bárbara y de la propia Asociación de Bolo Vaqueiro. Un encuentro que sirvió para intercambiar impresiones sobre un torneo que cada año gana más prestigio entre los jugadores.
Organización y deportistas coincidieron en destacar el éxito de participación, de público y de nivel de la cita y se conjuraron para alcanzar el próximo año 2016 la décima edición del campeonato. El torneo sigue la misma tendencia que la modalidad, que ha logrado consolidarse tras más de una década de organización federativa y a pesar de la crisis económica, agravada en concejos como Cangas del Narcea o Degaña por el problema de la minería.
Ahora el mundo del bolo vaqueiro inicia más de un trimestre de inactividad de citas oficiales, pues no será hasta la primavera de 2016 cuando se inicie una nueva temporada. Un nuevo año en el que el colectivo de peñas y deportistas deberá afrontar varios retos como mantener o incluso aumentar el número de equipos participantes en los Campeonatos de Asturias, así como aumentar el número de jugadores de categorías inferiores, imprescindible para que el deporte autóctono tenga relevo generacional.
