Muchas viviendas de Villar, Barcellina, Almuña, San Martín y El Chano, en el municipio de Valdés, amanecieron ayer con cubos caseros llenos de agua. La advertencia de que estos núcleos podían quedarse sin agua durante casi todo el día obligó a tomar precauciones. "Nosotras, por si acaso, hicimos acopio", comentaron, irónicas, las cocineras del único colegio con comedor que potencialmente se vería afectado por el corte, el centro público Ramón Muñoz.
Los vecinos de Luarca y los pueblos de su entorno tienen cada vez menos paciencia para soportar los cortes de agua. La capital de Valdés espera por una inversión millonaria que cambiará la infraestructura y mejorará las condiciones de suministro. Entre tanto, las viviendas y los negocios se exponen a cortes de suministro por avería. La red, con más de 40 años, está obsoleta y las roturas de tuberías en épocas de sequía o de lluvias son una amenaza.
El concejal de Obras, Ricardo García Parrondo (PSOE), explicó ayer que el corte fue preventivo. "Se detectó un contratiempo que en pocos días podría convertirse en una avería y se actuó", indicó. Los trabajos en el colector principal obligaron a cerrar el paso del agua, según informó, pero los núcleos que potencialmente se podían quedar sin agua pudieron abastecerse durante la mayor parte del día del remanente del depósito.
En el sector hotelero y hosteleros, esta realidad no se ve con tanta comprensión. El presidente de la Asociación Turismo Valdés Luarca, Evelio Sánchez, mostró su indignación por el aviso y por el potencial corte. "Tener agua potable es algo prioritario y básico", indicó. "No podemos competir como destino turístico si no tenemos un suministro muy fiable. Como vecino, creo que es esto es una vergüenza y que se tendrán que invertir los millones necesarios para solventar cuanto antes el problema", añadió.
La oposición política también expresó su queja. El portavoz del PP, Carlos Adaucto Iglesias, mostró su pesar por la gestión del problema. "Para empezar, se debe avisar con más tiempo de un contratiempo así. Los vecinos afectados se enteraron un día antes. Estos avisos se deben realizar con más antelación", indicó.
Iglesias también aseguró que la inversión millonaria que espera Valdés "parece que no llega. Siempre digo lo mismo, el PSOE vende humo. No tener agua en Luarca y los alrededores es no es estar en el siglo XXI".
El portavoz de URAS, Balbino Suárez, señaló que la traída, "como sabe todo el mundo, está muy deteriorada". El edil indicó que la obra para renovar la traída "tarda en llegar por falta de presión política. A mi juicio, se está engañando a los vecinos porque no se trata de cambiar una tubería de vez en cuando, se trata de hacer frente, ya, a una obra de calado", añadió.
Este diario intentó ponerse en contacto, sin éxito, con el portavoz del FAC en Valdés, José Modesto Vallejo.
