Dos meses después de que concluyera la esperada obra de estabilización del acantilado tapiego de Represas, ha vuelto a registrarse un desprendimiento en la misma zona. Las fuertes lluvias de principio de mes provocaron el arrastre de tierra, sin embargo responsables de la actuación defienden que la obra es segura y que se trata de un desprendimiento puntual de tierra que quedará corregido esta misma semana.
La empresa Altyum Proyectos y Obras, a quien la Demarcación de Costas en Asturias adjudicó la actuación por 506.900 euros, desplazó ayer a la zona a la firma Montaña Restauración Ambiental, que confía en que la reparación quede lista el viernes. Está previsto retirar la tierra desprendida, perforar el terreno para colocar tubos de drenaje y hacer una cuneta para que el agua que pueda filtrarse tenga fácil salida. Después se volverá a poner la manta y la malla protectora, según explicó ayer un responsable de los trabajos, que garantizó que la obra de estabilización no tiene riesgo alguno. En este sentido añadió que hay roca bajo la capa superficial de terreno desprendida.
En términos similares se expresó ayer el Alcalde tapiego, Enrique Fernández (PP), que fue quien dio el aviso a la empresa del pequeño desprendimiento registrado en el acantilado. "Fue una cosa puntual porque se soltó la red unos metros", precisó el regidor.
Los trabajos de emergencia se adjudicaron en abril del año pasado, después de que en diciembre de 2014 el Ayuntamiento tuviera que cerrar la carretera que discurre paralela a la costa por no poder garantizar la seguridad de los viandantes. La actuación realizada entre abril y noviembre del año pasado ha mejorado notablemente el entorno de Represas. No en vano, además de asegurar el talud, se ha construido una acera lateral que da seguridad a los peatones y funciona de mirador a la playa de Represas. Además se ha repuesto la carretera local por su trazado original.
Los trabajos de consolidación no estuvieron exentos de dificultad ya que la adjudicataria tuvo que trabajar al ritmo marcado por las mareas. De ahí que las obras se dilatasen más tiempo del inicialmente previsto.
El gobierno tapiego está pendiente ahora de si el Ministerio de Medio Ambiente inicia la obra de consolidación pendiente en la zona de El Cuitelo, donde también llevan años registrándose desprendimientos que amenazan a una vivienda del barrio de San Sebastián. El proyecto para asegurar la zona está valorado en 200.000 euros y está listo desde el verano pasado. No obstante, el gobierno local cree que la actual situación política podría retrasar la puesta en marcha de los trabajos. "Vamos a ver que pasa con los avatares políticos", precisa el Alcalde tapiego, quien tiene claro que de repetirse un gobierno popular la actuación saldrá adelante pues según explica los trabajos previos están muy adelantados.
