"Se abre un escenario en el que es preciso buscar una vía de solución, que tendrá que pasar por el cumplimiento de las decisiones de la asamblea de IU en Valdés, y que no suponga algo traumático para ninguna de las dos partes". Así se refirió en la jornada de ayer el diputado regional de Izquierda Unida, Ovidio Zapico, a la situación que vive la formación en el concejo valdesano. Una semana después de que la agrupación anunciara la ruptura del pacto de gobierno con el PSOE, Zapico defendió que se cumpla la voluntad de la asamblea, algo a lo que no parece dispuesto el único edil de la coalición, Gumersindo Cuervo.
Ovidio Zapico realizó estas declaraciones en Navia, a donde acudió para conocer los problemas del concejo, de la mano del portavoz del grupo municipal, Nacho Blanco, de la edil Margarita Iglesias y de simpatizantes de la coalición. La visita, además de tocar otros asuntos, como el estado de La Poza y el barrio de Las Vegas, giró en torno a un tema central: el ramal ferroviario de Ence, en el que IU asegura que se han invertido siete millones de eutos, y que son necesarios otros siete para verlo finalizado.
"Nos preocupa la situación del ramal, la cantidad de dinero público que ya se ha invertido, aunque nos preocupa más la previsión de que serán necesarios otros siete millones de euros para terminar una obra que a todas luces parece faraónica e injustificable", expresó Zapico, quien lamentó el estado en el que se han quedado las obras, "con vecinos pendientes de expropiaciones, y problemas de seguridad vial en la carretera que conduce a Villayón".
Manteniendo esa misma línea se expresó Nacho Blanco, que señaló que "se falta a la realidad" cuando la Administración señala que en la carretera a Villayón existe doble balizamiento y es segura. "Se apunta a un sobrecoste que llevaría la obra hasta los catorce millones de euros. Se trata de una actuación absurda e innecesaria, ideada simplemente para dar alegría al presidente regional, por aquel entonces Vicente Álvarez Areces, con el apoyo del alcalde Ignacio García Palacios", criticó Blanco, muy duro con el proyecto.
No en vano, el grupo municipal de IU "sigue estando en contra de esta obra". "Lo que suceda con lo que se ha invertido debe preguntarse a los responsables del despilfarro", apuntó el portavoz de IU en Navia, quien criticó que "aquí nadie dimite, nadie se pone colorado, y el dinero no volverá a las arcas públicas; el despilfarro correrá a cuenta de todos los asturianos", remató.
