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La apertura del ferial de Otur se retrasa de nuevo por las exigencias de Fomento

El recinto linda con la carretera nacional 634 y el Ministerio obliga a construir una glorieta antes de reabrir las instalaciones

Recinto ferial de Otur. A. M. SERRANO

El Ministerio de Fomento obliga a construir una glorieta para dar acceso al recinto ferial de Otur, en Valdés. Las instalaciones no han vuelto a abrirse al público desde que se inició el proyecto de reforma, al haber quebrado la empresa adjudicataria. Ahora, los trámites de apertura se complican un poco más porque hay un problema con los accesos. El recinto linda con la carretera nacional 634. La asociación de vecinos asegura que el acceso al ferial desde la carretera nacional, pero a través de una glorieta, es necesario para poder reabrir las instalaciones y así lo explica el Ministerio de Fomento en una misiva.

El alcalde, Simón Guardado, indicó ayer que "a lo largo de 2017" se solucionarán todos los problemas del complejo. La asociación de vecinos duda del nuevo plazo, como la oposición política. La presidenta del colectivo vecinal, María Asunción Iglesias, recalcó que la demora "no es de meses, sino de años. Otur necesita ya ese recinto para organizar no sólo la feria de muestras, sino todo tipo de actividades. Todo está parado", añadió.

El portavoz del Partido Popular, Carlos Adaucto Iglesias, aseguró que el caso "es vergonzoso. No podemos seguir así, dejando lo importante de lado. Me pregunto si en Otur el PSOE no saca los suficientes votos para hacer las cosas bien y en plazo", opinó.

El portavoz de los ediles no adscritos, José Modesto Vallejo, señaló que el recinto "es necesario no sólo para Otur, también para el concejo. Si no cuidan lo poco que tenemos, mal vamos", dijo. El portavoz de URAS, Balbino Suárez, destacó que "estos caprichos (por la obra del ferial) se pagan caros". Suárez invitó al gobierno a "reflexionar". "Si seguimos así, no sé qué será de Valdés", concluyó.

El recinto ferial es uno de los grandes asuntos sin cerrar del gobierno local. Las obras no fueron ejecutadas como preveía el proyecto. No se cumplieron los plazos y la empresa que se encargó de las obras se declaró en quiebra antes de concluir el proyecto. El Ayuntamiento de Valdés no quiso entrar en el recinto antes de que la constructora firmara la recepción de la obra. El asunto se atascó más tarde en los juzgados.

Sin el recinto ferial, la asociación de vecinos no está dispuesta a colaborar en la organización de la feria de Otur. El certamen dejó de celebrarse hace cuatro años al no estar disponibles las instalaciones. Gobiernos de distintos signos políticos anunciaron la reapertura del ferial, sin éxito.

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