"Los límites se tienen que ir superando con seguridad. Si la progresión del deportista es adecuada, los riesgos se reducen". Fue parte de la lección que transmitió ayer en el colegio Padre Galo de Luarca el surfista Manuel Peraita. El centro celebra estos días una semana cultural vinculada al deporte.
Ayer, los alumnos disfrutaron de historias de surf extremo y de las aventuras que aquellos que, como Manuel Peraita y Jorge Arenas, cabalgan olas de ocho metros gracias al arrastre de una moto de agua.
El coordinador de las charlas y profesor de Educación Física, Marcos Sánchez, destacó las bondades de este deporte extremo por necesitar hacer equipo. "Se trata de fomentar el compañerismo", dijo. También habló a los alumnos de infantil y primaria de la importancia de saber "decir no" si las circunstancias no acompañan. "Puede que tengas ganas se surfear, pero si cambia el mar, es mejor dejarlo para otro día", explicó. Pero si algo llamó la atención de los alumnos fue la moto de agua que desplazaron los surfistas y sus equipos, entre ellos, una tabla hecha por Pablo Díaz.
