El filólogo e investigador veigueño Luis Casteleiro, que precisamente hoy cumple 44 años, celebrará el próximo agosto el primer aniversario de su nombramiento como cronista oficial de Vegadeo. La efeméride coincidirá con la presentación oficial de "Historia (s) de Vegadeo", un trabajo en el que analiza de manera global el pasado del concejo.
- ¿De dónde parte la idea?
-Parte en realidad de una percepción personal. Me parece que en los últimos años han ido publicándose aportaciones muy interesantes sobre determinados aspectos del pasado de estas tierras del Eo, y creo que es un buen momento para integrar esos conocimientos y ofrecer una referencia más global.
- ¿Cuál debería ser la función de este trabajo?
-Lo importante es que despierte interés en la sociedad local y que sirva para abrir la puerta a investigaciones más densas y profundas sobre el pasado de Vegadeo.
- ¿Cuánto tiempo le llevó prepararlo?
-¿Tiempo? Imposible de medir, aunque me temo que si pusiese a funcionar un cronómetro mientras recopilo información o escribo sobre el pasado de Vegadeo me llevaría un buen susto? Por razones profesionales no puedo estar en Vegadeo todo lo que quisiera, y lo compenso investigando y escribiendo sobre mi pueblo, es una forma de estar allí.
- ¿Con qué se encontrará el lector?
-Con un libro de historias cercanas que buscan explicar lo que somos y sentimos en el oeste de Asturias. Con un libro que no pretende contarlo todo, pero que aborda y analiza múltiples aventuras colectivas e individuales que, leídas en conjunto, dan una imagen clara del devenir humano y sociopolítico de Vegadeo.
- Como buen conocedor de la historia local, pocas cosas le habrán sorprendido...
-Mantengo intacta mi capacidad de disfrutar y de sorprenderme con la historia de Vegadeo, porque a poco que se indague es fácil asombrarse. Son muchas las cosas que llaman la atención y que tienen su reflejo en el libro: la presencia de la Vega en la exposición universal de Londres de 1851, para la que se construyó el famoso Crystal Palace, o años después en París donde se expusieron unas fotografías del puente de Porto que asombraron a la sociedad francesa de aquel tiempo. También yo busco sorprender un poco con la estructura de este libro, que incluye capítulos poco comunes en los libros de historia. Hay uno, por ejemplo, dedicado al "Vegadeo que nunca existió", es decir, a analizar aquellos proyectos que de haberse realizado hubieran cambiado por completo la fisonomía del Vegadeo que hoy conocemos.
- ¿Cómo describiría la historia de Vegadeo?
-Es una historia de lucha. Seguramente todas lo son, pero estas tierras tuvieron que sobreponerse a muchas dificultades y pelear con muchos enemigos para llegar a ser lo que son. De ello hablo también con detalle en el libro, en capítulos como los dedicados a las riadas, al desarrollo de las comunicaciones o a las múltiples rivalidades históricas con los pueblos vecinos.
- El libro se edita por la implicación del ayuntamiento ¿la administración pública mima lo suficiente la historia local?
-En general, las administraciones están volcadas en la compleja gestión de la vida diaria, lo que es muy comprensible, pero aunque no tomen iniciativas directas en este ámbito sí que son receptivas y apoyan en la medida de sus posibilidades los proyectos de recuperación de la historia local. Al menos, eso es lo que yo me he encontrado siempre en el Ayuntamiento de Vegadeo.
- El año pasado impartió una charla para escolares repasando la historia de Vegadeo ¿la historia local debería estar más presente en la escuela?
- Para mí aquel encuentro con alumnado del Jovellanos, mi colegio, fue muy emocionante. Y sí, por supuesto, me parece que el patrimonio y la cultura local deben tener su hueco en la escuela. No diré yo que tenga que ser un contenido obligatorio, pero la microhistoria se ha olvidado con demasiada frecuencia en las técnicas didácticas, y creo que tiene muchas virtudes su uso en las aulas.
- Llama la atención que con el pasado rico y activo que ha tenido el concejo no exista un centro de interpretación o un museo ¿lo considera interesante?
-Claro, pero si hay que establecer prioridades yo antepondría la digitalización y dotación de un local adecuado para el Archivo Municipal, que alberga una documentación mucho más antigua que el propio concejo veigueño. Me parece imprescindible dar un paso más en la preservación de este acervo patrimonial, acondicionando un espacio específico y apropiado.
- El gobierno veigueño manifestó al inicio del mandato su compromiso con la recuperación del patrimonio local. En este ámbito se enmarca el plan de recuperación del caleiro La Sorpresa. ¿Qué le parece la idea?
-Estupenda. Inversiones como esta dotan de carácter e identidad a un pueblo.
- En materia patrimonial también se puede enmarcar la intención de apostar por el trazado original del Camino de Santiago por Abres. El consistorio quiere construir un albergue que refuerce esta salida de peregrinos. ¿Lo ve acertado?
-Uno de los capítulos del libro se dedica a analizar el frecuente tránsito histórico de peregrinos por el concejo de Vegadeo y los testimonios que fueron dejando estos viajeros. En las últimas dos décadas, la peregrinación ha vuelto a cobrar un impulso extraordinario, y la puesta en funcionamiento de un albergue tiene múltiples ventajas, económicas y de intercambio cultural. Con independencia de que pueda haber en el pueblo ideas encontradas sobre la mejor ubicación de este servicio, creo que sus beneficios son indudables.
