En Tapia, los niños conocen sus derechos, del primero al último. Los han dibujado, los han coloreado, los han memorizado e incluso los han cantado. Desde los pequeños de Infantil hasta los más mayores de Primaria, todos han trabajado y aprendido con ellos en clase. El colegio "Príncipe de Asturias" es, por todo ello, el único de toda la región que ha sido distinguido por Unicef, y uno de la treintena destacada en toda España. Ayer, coincidiendo con el Día universal del niño, se entregó el certificado que señala al centro tapiego como el primer "Centro referente en educación en derechos de infancia y ciudadanía global" de Asturias.
"Hoy es el día mundial de los niños y de las niñas, un día para ellos y de ellos; no hay mejor momento para recibir este galardón", reconocía la directora del colegio, Mary Cruz García, que recordó que es el segundo reconocimiento que realiza Unicef al centro, después de concederle, en 2013, el sello de escuela "Amiga de la infancia". "Ha pasado tiempo, y hemos avanzado en el objetivo de favorecer que el alumnado tome conciencia de sus derechos y sus responsabilidades, de participar y desarrollarse como ciudadanos conscientes, capaces de contribuir a la mejora de la sociedad", apuntó García.
En el centro, aseguró su directora, se educa para que los alumnos conozcan sus derechos y puedan "ejercerlos, reclamarlos, respetarlos y adaptarlos a las diferentes edades". Y, añade, se trabajan conceptos "a veces difíciles de entender, pero necesarios": justicia social, solidaridad, cooperación, desarrollo, toma de decisiones, pluralismo o globalización. Además, el centro actúa "como entorno protector", apuntó Mary Cruz García, velando y vigilando ante posibles casos de maltrato, acoso o agresiones; y favoreciendo un buen clima escolar basado en el respeto. "En este centro se viven los derechos de la infancia", aseguró.
María José Platero, presidenta de Unicef Asturias, reconoció el trabajo realizado en el centro tapiego: "Han conseguido integrar los derechos de los niños de una forma transversal en la vida del centro y de la comunidad educativa; se lo merecen porque lo han trabajado mucho".
En la misma línea se expresó el consejero de Educación, Genaro Alonso, que participó en la entrega del certificado, un acto que se convirtió en toda una fiesta. Alonso valoró el trabajo realizado en Tapia, un centro "que ha apostado con fuerza y con firmeza por estos valores, de una forma ejemplar", y destacó que se trata de un "compromiso para seguir trabajando" en esta línea.
