Lograr una máquina que ejecute el trabajo que hoy hacen tres: cortar el árbol, limpiarlo y trocearlo, y recoger la biomasa resultante para luego agruparla en pacas. Es el objetivo que se ha marcado la empresa Dingoma, afincada en el polígono industrial Río Pinto de Jarrio (Coaña). La firma es la única de la comarca que participa en un consorcio internacional de la Asociación Europea de la Innovación, a través de la Dirección General de Desarrollo Rural del Ministerio de Agricultura. "Supondría un gran avance para los empresarios del sector, se ganaría en eficiencia y rapidez", señala Rubén García, uno de sus responsables.
El plan aún se encuentra en fase embrionaria, pero se espera que pronto se pueda contar con un primer diseño del vehículo. Dingoma trabaja para ello junto a una empresa finlandesa, Fixtery Oy, especializada en el diseño de maquinaria para el mercado de la bioenergía. "El vehículo forestal con empacadora estará adaptado al mercado español de la biomasa", explica García, que señala que ésta es una de las necesidades más apremiantes que tiene un sector en auge.
La empresa Dingoma lleva afincada en Jarrio veintitrés años, y cuenta en la actualidad con una docena de trabajadores. Es líder en la elaboración de maquinaria forestal, y llevan algo más de 300 unidades vendidas desde el inicio. Aún sigue manteniendo un modelo de empresa familiar.
"El producto que hacemos es interesante, líder para los montes de España, sacando madera en distancias de uno o dos kilómetros. Estamos tratando de abrir el mercado europeo, sobre todo en Polonia o Francia", asegura el fundador de la empresa, Rubén García Acevedo. "Aún así, seguimos apostando por el mercado nacional", concluye.
