"Ha sido un auténtico privilegio y honor haber ocupado el puesto de Alcalde de Tapia durante estos últimos cinco años", señaló ayer emocionado Enrique Fernández "Revilla" (PP), durante el pleno extraordinario en el que se oficializó su dimisión como primer edil. Arropado por sus compañeros de partido de Tapia, por los alcaldes populares de Coaña, Salvador Méndez, y Villayón, Estefanía González, y por el secretario general del PP asturiano, Luis Venta, Fernández dijo adiós a la actividad política tras 35 años de dedicación y, de momento, sin sustituto claro ni de su partido ni del resto.

"Seguro que en la gestión diaria ha habido aciertos y errores y por eso quiero pedir disculpas", añadió, al tiempo que agradeció la labor de sus compañeros de gobierno, de la oposición socialista y de los trabajadores municipales. El regidor saliente señaló como sus principales logros al frente de la Alcaldía la reducción en 3,5 millones de la deuda municipal, así como la devolución de la "paz social" al concejo tras la tensión generada por los planes para abrir la mina de Salave.

A la concejala Salomé Sánchez, designada por su partido para capitanear a los populares hasta la designación de candidato a Alcalde, le tocó pronunciar unas palabras de agradecimiento en nombre del PP: "Hoy es un día para darte las gracias, porque no siempre ha sido fácil, porque siempre has estado ahí con tu seriedad y responsabilidad característica, porque ser político no es una tarea fácil y tú has sabido estar a la altura de las circunstancias siempre".

Le agradeció también que no dejara al PP "a la deriva" en los peores años de la formación, haciendo ilusión sin mencionarlo a la irrupción de Foro Asturias y a la marcha del exalcalde Gervasio Acevedo. "Tomaste el mando del barco del PP tapiego y no lo abandonaste por otros partidos emergentes que se consideraban regeneradores", incidió, además de alabar la "dedicación, firmeza y determinación" con la que Fernández gestionó sus ocupaciones permitiendo, a su juicio, que "este concejo hoy sea mejor".

La portavoz socialista, Ana Vigón, también tuvo unas palabras de despedida para el Alcalde, al que deseó "lo mejor" para disfrutar de la nueva etapa, dedicándose a todas aquellas cosas que tuvo que "dejar de lado" por sus responsabilidades de gobierno. "El tiempo pone cada cosa en su sitio y será el que juzgue los aciertos y los errores", señaló Vigón, quien reconoció el "peaje personal" que supone estar tantos años en política.

Luis Venta también se sumó a los agradecimientos y, al término del pleno, elogió a "un paisano que ha dedicado prácticamente su vida" a la actividad política. "Ha dejado el listón alto y ha hecho una gran labor desinteresada", añadió, al tiempo que confió en que el PP, como lista más votada, pueda seguir gobernando.

Además, en la sesión se formalizó la propuesta del PP para que Pedro Fernández ocupe el puesto de concejal que queda vacante. En todo caso, no asumirá el acta hasta el pleno de investidura, cuya convocatoria recaerá en el ya Alcalde en funciones, el forista Guzmán Fernández. Tiene diez días hábiles para convocarlo.