Si había alguna posibilidad de reconciliación entre los socialistas y los populares asturianos, ésta queda descartada tras el informe político aprobado por la comisión ejecutiva regional de la Federación Socialista Asturiana (FSA) que mañana dará a conocer el secretario general del partido, Javier Fernández, al comité autonómico, máximo órgano de decisión del partido entre congresos.
Los socialistas asturianos cierran todas las puertas a un posible diálogo con "el PP de Mercedes Fernández", quien, según la dirección del PSOE asturiano, "se ha convertido en el principal factor del deterioro del funcionamiento de la Junta General".
Las relaciones entre la FSA y los populares se vienen enturbiando desde el inicio de la legislatura autonómica. Los encontronazos en el Parlamento del Principado han sido constantes. Y todo ello después de que ambos partidos pactaran los Presupuestos de la comunidad de 2015.
Si nos guiamos por el informe político de la ejecutiva regional de la FSA, pensar en algún tipo de tregua entre las dos formaciones más votadas de Asturias es imposible, al menos a corto y medio plazo. A Javier Fernández le irritan los populares. Por eso ha decidido hacer efectiva la ruptura sin ningún matiz. Considera al PP un partido "para la distorsión, el efectismo y la corrosión del Gobierno" que él preside.
Tras este descarte, al jefe del Ejecutivo autonómico -que opina que PP y Foro ya son el mismo partido, el Foropepé- sólo le queda la opción de Podemos para intentar lograr algún tipo de estabilidad gubernamental. Y, aunque en este caso deja resquicios a la negociación, lo cierto es que de la globalidad del informe de la ejecutiva se desprende que los socialistas ven muy, pero que muy improbable un acercamiento a Podemos.
Eso sí, Javier Fernández, no considera otra opción que no sea la de seguir presidiendo el Ejecutivo autonómico. "Bajo ningún concepto", se dice en el informe, "los socialistas vamos a desistir de nuestra responsabilidad al frente del Gobierno de Asturias".
